
En el estadio La Nueva Olla, en Asunción, Paraguay, River Plate y Talleres de Córdoba protagonizaron una final por demás pareja. Tras los 90 minutos igualaron 0-0. Con ese marcador, la final de la Supercopa Internacional se definió por penales, antes de jugarse un alargue de 30 minutos dividido en dos tiempos de 15 minutos. En la tanda de penales la victoria quedó para los cordobeses por 3-2. El tucumano Matías Kranevitter ingresó por Enzo Pérez, en el alargue.
En el comienzo, por el lado de los cordobeses, apostó más a los remates a distancia. Un cabezazo clarísimo de Federico Girotti, no logró ser eficaz fue lo más claro a los 41 minutos. La acción de Franco Mastantuono, en River fue la de más peligro cuando el delantero se desmarcó y pudo acomodarse para pegarle a la pelota que se desvió por poco en un rival. La pelota siguió en juego y fue el mismo juvenil el que conectó una volea elevada que se fue apenas por encima del travesaño.
En el segundo tiempo, los dos equipos continuaron sin ideas. Si se generaban buenas jugadas, en los últimos metros fallaban. El partido empezó a "calentarse": hubo discusiones, muchas imprecisiones y malas decisiones.
En las prórrogas, tampoco un cambio en el juego y la paridad se mantuvo. La tanda de penales también se extendió más de los 10 tiros reglamentarios. En River Plate, Herrera le atajó a Matías Rojas, Gonzalo "Pity" Martínez y Miguel Borja anotaron, Gonzalo Montiel, Facundo Colidio y Manuel Lanzini, fallaron.
Los cordobeses tuvieron el siguiente rendimiento: Emanuel Bebelo Reynoso fue el único que falló, Joaquín Mosqueira anotó, Armani le atajó a Cristian Tarragona y Ulises Ortegoza y Nahuel Bustos y Gastón Benavídez marcaron sus goles.