A pesar del prestigio científico, de la presencia de unicornios tecnológicos y del despliegue de universidades públicas y privadas a lo largo del país, la Argentina aún no logra estar a la vanguardia de la inteligencia artificial. Si bien esta área de la tecnología ha despertado interés en los últimos tres años -impulsada por la aparición de ChatGPT-, se trata de una disciplina de las ciencias informáticas que lleva años de desarrollo, principalmente en áreas de investigación o de empresas líderes que ya estaban aplicando algoritmos inteligentes en sus procesos.
Solo un reducido grupo de países está liderando la adopción y desarrollo de la IA en la región frente al enorme desafío que está planteando este cambio tecnológico. Según un informe reciente de la Comisión Económica para América latina y el Caribe (Cepal), Chile, Brasil y Uruguay son los tres países que más avanzaron en algunos aspectos clave como la conectividad, el desarrollo de talento tecnológico y la adopción de estrategias nacionales orientadas a la IA. Este avance, medido por un índice que elabora la Cepal junto al Centro Nacional de Inteligencia Artificial de Chile (Cenia), posiciona a dichos países como pioneros en América Latina, situándolos entre los que superaron los 60 puntos en la medición regional.
El informe, en su tercera edición, evaluó el avance de la IA en 19 países de América latina y el Caribe, región a la que caracterizaron con desafíos críticos como baja capacidad de crecimiento, alta desigualdad y limitadas capacidades institucionales. A pesar de ello, los expertos de la Cepal consideran que la IA es vista como una herramienta estratégica para impulsar el desarrollo productivo sostenible, reducir brechas sociales y fortalecer la gobernanza. Por dicho motivo, evaluaron tres dimensiones principales: factores habilitantes (infraestructura, talento y datos), investigación, desarrollo y adopción, y gobernanza. A partir de dichas variables, concluyeron que los resultados volvieron a revelar un panorama profundamente heterogéneo.
Una de las principales advertencias del reporte fue que, si bien la conectividad está mejorando en la región y la inclusión de IA en currículos escolares está creciendo, persiste aún un “embudo” en la formación avanzada. Otra asimetría que se puede medir es la capacidad de cómputo de alto rendimiento y aquí destacaron que Brasil concentra más del 90% de la capacidad, mientras que muchos países carecen de infraestructura crítica. Finalmente, indicaron que la investigación en IA es escasa y altamente concentrada, con Brasil y México reuniendo el 68% de los investigadores activos. En cuanto a la gobernanza, el principal desafío reside en la implementación efectiva de normativas o estrategias nacionales de IA. Sin embargo, la mayoría de los países carece de presupuestos asignados, planes de ejecución o indicadores de impacto, lo que las convierte en meras declaraciones.
País “adoptante”
Nuestro país no supera los 60 puntos para ser considerado “pionero” en IA. Según todas las variables, Argentina se clasifica en la categoría de país “adoptante”, con un puntaje total de 52,98 puntos. Esta categoría denota avances intermedios, aunque persisten brechas críticas que limitan el desarrollo y la adopción de la IA, especialmente en la capacidad de investigación e innovación. Entre los aspectos locales que se destacaron, la Cepal menciona un alto porcentaje de hogares con acceso a internet y una población que usa internet dicha tecnología| superando ambos el promedio regional. Aún así, Argentina enfrenta desafíos en infraestructura de cómputo, un aspecto crítico para desarrollar modelos de IA propios. En términos brutos, Argentina tiene una capacidad de cómputo de alto rendimiento (HPC) de 8.582 teraflops por segundo, la segunda más alta de la región, pero aún así, está muy por debajo de Brasil. En la dimensión de Investigación, Desarrollo y Adopción (I+D+A), Argentina se ubica entre los países con desempeño medio con 46,2 puntos. Además, es parte del grupo de cinco países que concentran el 90% de las publicaciones y el 87% de los investigadores activos en IA de la región. En Innovación y Desarrollo (, Argentina destaca en el valor total estimado de inversiones en IA, obteniendo el máximo puntaje regional (100 puntos) una vez normalizado por población, y en términos brutos, el valor es de USD 7.135 millones. Además, Argentina forma parte de los seis países de la región que cuentan con empresas unicornio.
Finalmente, respecto a la Gobernanza, Argentina se sitúa en la categoría “avanzada” con 66,74 puntos. El informe detalla que el país cuenta con una estrategia nacional de IA adoptada oficialmente en 2019, pero que no ha tenido continuidad ni ha sido actualizada desde entonces, lo que afecta su puntaje en este indicador. Es decir, en la estrategia nacional, aún no se incorporó esta nueva ola de innovación que vivimos desde finales de 2022. A pesar de la falta de actualización, la estrategia incluye explícitamente aspectos clave como ética y gobernanza, infraestructura y tecnología, desarrollo de capacidades, datos, gobierno digital, industria e investigación y desarrollo.
Es curioso ver cómo países más chicos que Argentina como Chile y Uruguay ocupan el podio en el desarrollo de esta tecnología de vanguardia cuyo potencial puede medirse con datos concretos como los arrojados por la Cepal. Sin dudas, un plan estratégico nacional en IA podría impactar significativamente en el desarrollo económico de los países y estos expertos ya lo están advirtiendo. Advertencia que debería resonar en las instituciones que tienen a cargo no solo el despliegue de consumo de tecnología, sino principalmente el desarrollo de la misma, para que en un futuro (no muy lejano) podamos contar con una verdadera industria del conocimiento a la altura, al menos, de nuestros países vecinos .






















