Una reforma amplía la capacidad de adolescentes para hacer inversiones con bonos y acciones

La Comisión Nacional de Valores (CNV) presentó la resolución como un avance en educación financiera: se trata de un cambio que habilita a jóvenes de 13 a 17 años a operar con instrumentos más complejos, como fondos con bonos, acciones y activos del exterior. La medida permite en los hechos que adolescentes ingresen al mercado financiero argentino, una apertura que despierta inquietud en algunos sectores por sus consecuencias patrimoniales y para la salud mental.

La normativa establecida por la Resolución General Nº 1.091 modifica el esquema previo que limitaba a los menores a fondos de liquidez inmediata. Estos productos no exponen a movimientos bruscos del mercado, a diferencia de los vehículos que ahora quedan habilitados. La actualización se sostiene en el principio de autonomía progresiva. El desafío es que este acceso temprano a los mercados de capitales vaya de la mano de una comprensión adecuada de los riesgos financieros.

El argumento oficial se vincula con fomentar hábitos de ahorro y planificación, pero la medida también abre interrogantes sobre la exposición temprana a instrumentos que incluso resultan complejos para adultos sin formación económica.

Un acceso ampliado que también trae riesgos

Con la nueva resolución, los adolescentes podrán invertir en Fondos Comunes de Inversión que incluyan bonos, acciones, obligaciones negociables y deuda provincial, además de activos de otros países. Es un conjunto de productos que responde a dinámicas de mercado más volátiles y que requiere lectura constante del contexto económico.

Estas operaciones se realizarán mediante subcuentas comitentes creadas por la CNV para mayores de 13 años. Funcionan dentro de una cuenta principal controlada por un adulto, aunque la supervisión efectiva depende de las posibilidades reales de acompañamiento en cada hogar. El crecimiento acelerado de estas subcuentas, casi 1,2 millones hasta septiembre, según la CNV, muestra el interés existente, pero también la necesidad de reforzar el nivel de formación de las nuevas generaciones de inversores.

Las restricciones que buscan evitar exposición excesiva

La resolución fija límites para reducir riesgos, aunque no elimina la complejidad de los instrumentos permitidos. Los adolescentes no podrán participar en fondos cerrados ni en productos destinados a inversores calificados, donde la exposición es mayor y los requisitos de conocimiento son estrictos. Tampoco podrán acceder a estos vehículos con autorización de padres o tutores.

La Comisión Nacional de Valores sostuvo que el objetivo es proteger a las personas menores de edad sin impedirles un acercamiento inicial al mundo financiero. Se trata de una reforma impactante en la Argentina, donde, por efecto de la inflación y de las crisis económicas, la población adulta en general tuvo escasas posibilidades de ahorrar y de cultivar un perfil inversor.