El menú navideño precisa de un contra-menú natural, libre de toxinas y bajo en grasas. Foto: InStyle
La cena de Nochebuena y las comidas de Navidad son un mix explosivo para el sistema digestivo. Además, diciembre viene con la carga de las despedidas y reuniones de fin de año, que suelen estar cargadas de grasas y calorías. El organismo queda sobrecargado por los excesos de harinas, azúcares y alcohol. La dieta detox es ideal porque promueve una alimentación liviana y ordenada.
Este tipo de alimentación colabora con el trabajo natural del hígado y los riñones, que son los encargados de eliminar toxinas. Durante estos días, hasta el 31 por lo menos, es importante reducir el consumo de sal y de ultraprocesados. La hidratación también es fundamental para que los riñones trabajen con mayor facilidad y expulsen los restos que no necesita el organismo.
Menú detox de tres días: cómo preparar el organismo antes de fin de año
Día 1. Desinflamar y rehidratar
Desayuno. Infusión de té verde o manzanilla, una rodaja de pan integral con palta y limón.
Media mañana. Una fruta fresca como ananá, pera o manzana.
Almuerzo. Ensalada grande de hojas verdes, pepino y zanahoria rallada con pechuga de pollo grillada. Aderezar con aceite de oliva y limón.
Merienda. Yogur natural descremado con una cucharada de semillas de chía o lino.
Cena. Sopa casera de verduras con zapallo, zanahoria, puerro y cebolla más una infusión digestiva antes de dormir.
Día 2. Limpiar y activar el metabolismo
Desayuno. Licuado de frutas con agua o bebida vegetal. Puede ser de pera, espinaca y jengibre.
Media mañana. Un puñado chico de frutos secos.
Almuerzo. Filet de pescado al horno o a la plancha con puré de calabaza o batata. Ensalada simple de tomate y hojas verdes.
Merienda. Té de boldo o menta con una tostada integral con queso untable magro.
Cena. Omelette de claras y huevo entero con verduras salteadas.
Día 3. Aliviar el hígado y recuperar energía
Desayuno. Avena cocida con agua o leche descremada, rodajas de banana y canela.
Media mañana. Jugo natural de naranja o pomelo sin azúcar.
Almuerzo. Ensalada tibia de lentejas con verduras, huevo duro, cebolla morada, zanahoria y perejil. Aderezar con limón y aceite de oliva.
Merienda. Fruta fresca con infusión digestiva.
Cena. Crema de verduras liviana, una tostada integral y agua o té suave antes de dormir.























