03 Junio 2013
La psicóloga trucha también tiraba las cartas
Ex pacientes de Anna Inés Feler aseguran que la mujer era astróloga y que cobraba por "trabajos" de "magia blanca" en su consultorio. Varias personas tienen vergüenza de contar sus experiencias, pero admiten que le pagaron a la mujer para recuperar una pareja.
Atendía como psicóloga, pero su fuerte era la astrología. Así lo sostienen ex pacientes, o ex clientes, de la mujer que decía llamarse Anna Inés Feler, aunque su verdadero nombre es Inés Jesús Barros. Pero no sólo su identidad era falsa, sino que también se presentaba como psicóloga sin contar con un título habilitante para ejercer esa profesión.
Feler atendía pacientes en su consultorio particular desde hace 13 años. Personas que pasaron por ese lugar aseguran que las sesiones de terapia tenían un plus. Ante determinadas situaciones, la falsa psicóloga habría tenido como costumbre sacar un juego de naipes y tirarles las cartas a sus pacientes. También habría ofrecido hacer "trabajos" a cambio de dinero con la promesa de lograr una unión de pareja o la recomposición de una relación amorosa.
"Cuando leí la nota en LA GACETA me puse contento", expresa un ex paciente de Feler (o Barros). El hombre se niega a revelar su nombre por vergüenza. "Como yo, también hay otras personas que no la denunciaron porque tenían vergüenza de contar algunas cosas", admite.
Según esta persona, la falsa psicóloga le pidió $ 5.000 a cambio de solucionarle un problema sentimental. El paciente dice que pagó confiado, pero que poco después descubrió el engaño. "La llamé por teléfono y le dije 'sos una mentirosa, vos ni siquiera te llamás Anna Inés Feler' y me cortó, nunca más me volvió a atender", relata el ex paciente, que asegura conocer varios testimonios similares al suyo.
Astróloga
Mientras leían el artículo publicado ayer en LA GACETA, varias personas reconocieron el nombre de Feler. Algunas se sorprendieron al conocer la noticia, mientras que otras ya estaban al tanto del asunto. Es que el rumor circuló con rapidez entre sus pacientes y conocidos en cuanto la fiscala de Instrucción Adriana Giannoni ordenó el allanamiento de su consultorio, que funcionaba en el departamento "A" del edificio de avenida Sarmiento 1.275, el 8 de mayo pasado.
Sin embargo, no todas esas personas habían sido sus pacientes. Gran parte de ellas sólo la conocían como astróloga. "Recuerdo haber ido a que me tire las cartas hace como 10 años. Ni siquiera sabía que también atendía como psicóloga", asegura una mujer que le consultó acerca de su futuro en una oportunidad.
En internet
Una mujer con el mismo nombre de Anna Inés Feler aparece registrada en la página de internet www.astrologosdelmundo.com ("punto de encuentro para todos los astrólogos del mundo") donde se presenta como estudiante de astrología. La foto de ese perfil coincide con la imagen que presenta Anna Inés Feler en la red social Linkedin. En ese sitio web indica que es propietaria del "Centro Integral de Salud Mental Feler y Asociados" desde junio de 2000 y menciona a la Facultad de Filosofía y Letras como el lugar donde cursó sus estudios.
El caso de la falsa psicóloga salió a la luz cuando una de sus pacientes la denunció por estafa. Según la demanda, la víctima le había contado a Feler que estaba por ser desalojada y la psicóloga trucha le pidió $ 10.000 para conseguirle una casa en el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV).
De esa manera, se descubrió que Feler no aparecía en los registros del Colegio de Psicólogos y que el número de matrícula que figuraba en sus tarjetas personales y recetarios pertenece a otro profesional. Tampoco existía en ningún registro de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Tucumán.
Feler atendía pacientes en su consultorio particular desde hace 13 años. Personas que pasaron por ese lugar aseguran que las sesiones de terapia tenían un plus. Ante determinadas situaciones, la falsa psicóloga habría tenido como costumbre sacar un juego de naipes y tirarles las cartas a sus pacientes. También habría ofrecido hacer "trabajos" a cambio de dinero con la promesa de lograr una unión de pareja o la recomposición de una relación amorosa.
"Cuando leí la nota en LA GACETA me puse contento", expresa un ex paciente de Feler (o Barros). El hombre se niega a revelar su nombre por vergüenza. "Como yo, también hay otras personas que no la denunciaron porque tenían vergüenza de contar algunas cosas", admite.
Según esta persona, la falsa psicóloga le pidió $ 5.000 a cambio de solucionarle un problema sentimental. El paciente dice que pagó confiado, pero que poco después descubrió el engaño. "La llamé por teléfono y le dije 'sos una mentirosa, vos ni siquiera te llamás Anna Inés Feler' y me cortó, nunca más me volvió a atender", relata el ex paciente, que asegura conocer varios testimonios similares al suyo.
Astróloga
Mientras leían el artículo publicado ayer en LA GACETA, varias personas reconocieron el nombre de Feler. Algunas se sorprendieron al conocer la noticia, mientras que otras ya estaban al tanto del asunto. Es que el rumor circuló con rapidez entre sus pacientes y conocidos en cuanto la fiscala de Instrucción Adriana Giannoni ordenó el allanamiento de su consultorio, que funcionaba en el departamento "A" del edificio de avenida Sarmiento 1.275, el 8 de mayo pasado.
Sin embargo, no todas esas personas habían sido sus pacientes. Gran parte de ellas sólo la conocían como astróloga. "Recuerdo haber ido a que me tire las cartas hace como 10 años. Ni siquiera sabía que también atendía como psicóloga", asegura una mujer que le consultó acerca de su futuro en una oportunidad.
En internet
Una mujer con el mismo nombre de Anna Inés Feler aparece registrada en la página de internet www.astrologosdelmundo.com ("punto de encuentro para todos los astrólogos del mundo") donde se presenta como estudiante de astrología. La foto de ese perfil coincide con la imagen que presenta Anna Inés Feler en la red social Linkedin. En ese sitio web indica que es propietaria del "Centro Integral de Salud Mental Feler y Asociados" desde junio de 2000 y menciona a la Facultad de Filosofía y Letras como el lugar donde cursó sus estudios.
El caso de la falsa psicóloga salió a la luz cuando una de sus pacientes la denunció por estafa. Según la demanda, la víctima le había contado a Feler que estaba por ser desalojada y la psicóloga trucha le pidió $ 10.000 para conseguirle una casa en el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV).
De esa manera, se descubrió que Feler no aparecía en los registros del Colegio de Psicólogos y que el número de matrícula que figuraba en sus tarjetas personales y recetarios pertenece a otro profesional. Tampoco existía en ningún registro de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Tucumán.