18 Junio 2013
PRAGA.- El primer ministro de la República Checa, Petr Necas (foto), renunció ayer a su cargo, en el marco de un gran escándalo de escuchas ilegales, denuncias de corrupción y pago de sobornos a legisladores. "Reconozco mi responsabilidad política", señaló el domingo, tras una reunión de su Partido Popular Democrático, de centro-derecha, y a casi tres años de asumir. La nota de dimisión fue elevada al presidente, Milos Zeman, lo que implica también el fin del mandato de todo el Gobierno. Zeman puede encargar a otro dirigente la formación de un nuevo gabinete o nombrar un equipo ministerial de transición. Además, la Cámara de Representantes tiene el derecho de declarar su disolución con una mayoría de 3/5 partes de sus miembros, lo que llevará a una nueva votación. La decisión de Necas era esperada luego de que la Policía detuvo a su jefa de gabinete, Jana Nagyova, y a varios generales de la inteligencia militar. Entre las espiadas estaba la propia esposa del premier, que inició el trámite de divorcio. "El viraje en mi vida privada actualmente afecta la escena política", admitió Necas. (DPA)
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