29 Noviembre 2013
La primera semana de audiencias del debate oral en el que se está juzgando a los agentes Gonzalo Pablo González (28), Gabriel Alberto Ocampo (25) y al cabo Edgardo Marcelo Gómez (38) por el homicidio del yesero Marcos Fabián Ybarra concluirá hoy. Pero por la cantidad de testigos que deben declarar -son casi 40- el tribunal de la Sala III de la Cámara Penal, formado por los jueces Stella Maris Arce, Carlos Caramuti y Dante Julio José Ibáñez, a cargo de la presidencia deberán definir si el proceso continuará el lunes.
En la tercera jornada del juicio los defensores de los imputados analizaron la situación procesal de sus clientes. Horacio Guerineau y Agustín Guerineau patrocinan al agente Ocampo y consideraron que hasta ahora las pruebas presentadas por la querella se sostienen sólo en declaraciones de testigos que son vecinos, amigos o familiares de la víctima. "Todos dijeron que estaban en la vereda cuando ocurrieron los hechos. Lo cual es imposible. Además hubo varias contradicciones en sus declaraciones. En este caso la Policía cumplió estrictamente las instrucciones y normas que tiene la institución", dijo Horacio Guerineau.
Los tres policías son acusados de haber disparado el arma que asesinó a Ybarra. Y en este sentido, el abogado sostuvo que Ocampo y sus compañeros llegaron a la esquina de la avenida Francisco de Aguirre y Juan Luis Nougues -lugar en el que dispararon contra la víctima- persiguiendo a un presunto ladrón que había cometido un robo en Emilio Castelar al 3300. "Encontraron al sospechoso junto con un grupo de drogadictos que todos (los testigos) reconocieron. Ellos fueron a cumplir con su deber que era detenerlo", concluyó.
En el momento de la detención, uno de los sospechosos logró escaparse y fue ahí -según afirmaron los testigos- cuando los policías comenzaron a disparar. Uno de esos proyectiles habría terminado con la vida de Ybarra. Sin embargo, los defensores sostuvieron que las pericias balísticas indicaron que los uniformados no usaron sus armas en el procedimiento.
Los letrados Felipe Taboada y Vanesa Ruiz defienden al cabo Gómez que conducía el móvil TUC 2181 el día del homicidio. En este marco, uno de los argumentos de la querella para inculpar a los imputados que trabajaban en la Seccional 12° es que no avisaron lo que había pasado cuando volvieron a la dependencia. "No avisaron porque se dieron con que había un colectivo con una persona desmayada dentro del coche frente a la comisaría. Pero siempre actuaron obedeciendo una orden superior", explicó Taboada. El agente González, en tanto, es defendido por Jorge Lobo Aragón.
En la tercera jornada del juicio los defensores de los imputados analizaron la situación procesal de sus clientes. Horacio Guerineau y Agustín Guerineau patrocinan al agente Ocampo y consideraron que hasta ahora las pruebas presentadas por la querella se sostienen sólo en declaraciones de testigos que son vecinos, amigos o familiares de la víctima. "Todos dijeron que estaban en la vereda cuando ocurrieron los hechos. Lo cual es imposible. Además hubo varias contradicciones en sus declaraciones. En este caso la Policía cumplió estrictamente las instrucciones y normas que tiene la institución", dijo Horacio Guerineau.
Los tres policías son acusados de haber disparado el arma que asesinó a Ybarra. Y en este sentido, el abogado sostuvo que Ocampo y sus compañeros llegaron a la esquina de la avenida Francisco de Aguirre y Juan Luis Nougues -lugar en el que dispararon contra la víctima- persiguiendo a un presunto ladrón que había cometido un robo en Emilio Castelar al 3300. "Encontraron al sospechoso junto con un grupo de drogadictos que todos (los testigos) reconocieron. Ellos fueron a cumplir con su deber que era detenerlo", concluyó.
En el momento de la detención, uno de los sospechosos logró escaparse y fue ahí -según afirmaron los testigos- cuando los policías comenzaron a disparar. Uno de esos proyectiles habría terminado con la vida de Ybarra. Sin embargo, los defensores sostuvieron que las pericias balísticas indicaron que los uniformados no usaron sus armas en el procedimiento.
Los letrados Felipe Taboada y Vanesa Ruiz defienden al cabo Gómez que conducía el móvil TUC 2181 el día del homicidio. En este marco, uno de los argumentos de la querella para inculpar a los imputados que trabajaban en la Seccional 12° es que no avisaron lo que había pasado cuando volvieron a la dependencia. "No avisaron porque se dieron con que había un colectivo con una persona desmayada dentro del coche frente a la comisaría. Pero siempre actuaron obedeciendo una orden superior", explicó Taboada. El agente González, en tanto, es defendido por Jorge Lobo Aragón.
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