En el TOF, reclamaron un fallo “ejemplar”

“No hay justicia sin legalidad”. “Liberen a los presos políticos”. “No más negocios con los derechos humanos”. Con esos lemas y bajo la lluvia, familiares de la mayoría de los 41 imputados de la megacausa “Arsenales II-Jefatura II” se manifestaron ayer frente al Tribunal Oral Federal (TOF), en Chacabuco y Crisóstomo Álvarez. A cuatro días de la sentencia, afirmaron estar “esperanzados” e instaron a los jueces a actuar con “imparcialidad” y “legalidad” y a brindar un fallo “ejemplar”. De la convocatoria participaron delegaciones del grupo nacional “Hijos y nietos de presos políticos”, el legislador Ricardo Bussi (Fuerza Republicana), hijo del represor Antonio Bussi, y el concejal Claudio Viña (Fuerza Republicana). También asistió María Cristina “Maby” Picón de Viola, viuda del capitán Humberto Viola (asesinado por el ERP en 1974 junto a una de sus hijas).

Aníbal Guevara, miembro de “Hijos y nietos”, cuestionó cómo se desarrollan los procesos. “Para nuestros padres (el suyo fue juzgado en Mendoza) hay un estándar paralelo. Desde que son acusados pasan a ser culpables y se le aplican prisiones preventivas de ocho y 10 años, cuando pueden ser de hasta tres”, explicó. Criticó también las condiciones de detención.

Josefina Ocaranza, hija del ex militar Luis Ocaranza, aseguró que tienen la “esperanza puesta en el Tribunal”: “si creeríamos que tiene todo armado, no estaríamos aquí. Pedimos que sean imparciales e independientes”. Sostuvo que advirtieron irregularidades desde el inicio. “Mi papá está preso desde antes del juicio. Había una acusación y ahora hay otra. No es claro. Cualquiera que estuviese en nuestro lugar reaccionaría así. Es mi papá y creo en él. Que esté metido en una megacausa y que se lo titule con algunas etiquetas fuertes te pone en acción”, reflexionó. Lorena Moore, hija de Alfredo Moore, consideró “discriminatorio” que no se les conceda la prisión domiciliaria siendo mayores. “Se juzga y se condena por el solo hecho de haber estado en un lugar en un tiempo determinado. Se rechazan sistemáticamente las presentaciones de las defensas. Respetamos el dolor de las víctimas y el de sus familiares. De la misma forma en que respetamos el dolor ajeno, nuestro reclamo no debe ser desestimado”, instó. Alejandro Palomo, hijo del ex gendarme Benito Palomo, concluyó: “el juicio va a terminar y vamos a recibir el último golpe y nos va a doler. Enfrentemos lo que vendrá con la convicción de que estamos aquí por amor. Trabajemos para que el final del juicio sea un nuevo comienzo”.

Bussi expresó su apoyo y cuestionó al Tribunal: “es una injusticia. Los jueces están presionados; no hay jueces con coraje para hacerle frente al poder”.