La violencia y el caos se trasladaron a la plaza Independencia

La policía reprimió violentamente a los manifestantes en la casa de Gobierno con balas de gomas y gases. En algunos barrios sigue reinando el caos y los vecinos se tienen que proteger por sus propios medios.

LA GACETA/ FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO LA GACETA/ FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
10 Diciembre 2013
El caos sigue reinando en Tucumán. Vecinos se acercaron a la plaza Independencia, después de que se anunciara el acuerdo entre el Gobierno y la Policía, para reclamar más seguridad. Lo que empezó como un cacerolazo pacífico, se transformó en una seguidilla de actos de violencia cuando la policía reprimió violentamente a los manifestantes.

Algunos de los tucumanos que se encontraban en la plaza Independencia rompieron autos de funcionarios y traspasaron las vallas de la casa de Gobierno y le tiraron piedras. Ante el avance, la policía salió a reprimirlos, con balas de goma y gases lacrimógenos, lo que provocó varios heridos. La actitud de las fuerzas de seguridad enajenó más a los presentes, que continuaron protestando. Gendarmería tuvo que intervenir para que la situación no se vuelva más violenta.

Desamparados
Vecinos de distintos barrios de Tucumán llamaron desesperados a LA GACETA. Aunque la policía volvió a la calle, no llegó a algunos sectores, donde los vándalos tratan de hacerse de sus últimos motines. En el barrio Caritas, de Alderetes se atrincheraron, cerraron las calles, prendieron fuego a gomas y se protegen con palos y armas de los delincuentes, que empezaron a atacar barrios aledaños. Algo muy parecido pasa en el barrio 20 de junio. "Vienen de San Cayetano, la policía pasa de largo a otros barrios", contó un vecino.

Atrincherados

Antes de que se llegue al acuerdo, en varias esquinas del centro, los comerciantes y vecinos decidieron cortar el paso. Con tarimas de madera, hierros y otros elementos, improvisaron una barricada, preocupados por los hechos de violencia que se produjeron en la provincia.

"Dicen que vienen en motos, de norte a sur", relató Patricio, de 38 años, empleado de un negocio que queda cerca de la esquina de 25 de mayo y San Juan. Él era uno de los hombres que estaba construyendo la barrera. Aseguró que no escuchó disparos ni vio corridas, como sucedió en otros puntos de Tucumán, pero los rumores hicieron que decidieran cortar el paso, al igual que ocurrió en otras calles de la ciudad.

"Lo que más nos preocupan son las motos; recién pasaron cuatro juntas, que las venía persiguiendo una camioneta de Gendarmería", señaló Patricio. Víctor, de 51 años y compañero de trabajo de aquel, aseguró que no les temblará el pulso si observan movimientos preocupantes. "Si llegan más de cuatro motos cargadas con gente y no se bajan, por aquí no pasan", advirtió el hombre. Esto ocurrió ceca de las 17, y sobre la esquina noroeste de San Juan y 25 de Mayo había una decena de policías observando cómo los vecinos y empleados de comercio armaban la barricada.

Publicidad
Comentarios