06 Enero 2014
LE GUSTÓ. El Mini de Nasser Al Attiyah atraviesa un vado a toda velocidad. El qatarí, que terminó en el tercer lugar, dijo que los tramos de competencia en zonas de Córdoba y San Luis le encantaron.
SAN LUIS.- Primera jornada del Dakar 2014 y primeras consideraciones. ¿Sorprende el líder? En cierta manera, sí. El portugués Carlos Sousa (con Haval) hizo el 1 en la etapa Rosario-San Luis. Y lo logró sin que, en los planes previos, se lo haya considerado siquiera entre los posibles favoritos. Claro que el europeo no estuvo cómodo. El mendocino Orlando Terranova, con un Mini, terminó a apenas 11”. “Fue una buena jornada y un buen inicio de rally. No quise asumir riesgos en esta primera etapa. El auto respondió bien, así que estoy satisfecho con este primer día de competencia”, señaló “Orly”.
¿Y qué dijo Sousa? Algo sorprendente. “Firmé un buen resultado, pero fue muy duro. Me quedé sin aire acondicionado y se bloquearon todas las entradas de ventilación. Además se dañó la salida de aire del turbo, por lo que el aire del motor llevó la temperatura del habitáculo a unos 70 grados, ¡casi no podía respirar! Creo que si manejé tan deprisa es porque quería acabar cuanto antes con el martirio”. Un detalle: el líder llegó a la meta al mando de un naftero, todo un logro en tiempos dakarianos en los que solo los vehículos diesel coparon la cima.
Nasser Al Attiyah, llegó 3° y muy conforme con su trabajo y con el andar del Mini. “Me encantó el especial, muy lindo y técnico”, se entusiasmó. No opinó lo mismo el español Carlos Sainz, 5° con un Buggy. “Fue un tramo sinuoso, lentísimo, de lo peor para mi coche.” El “Matador” no estaba de buen humor, sobre todo porque Joan Roma, 4° en la prueba, le reclamó por no dejarlo pasar siendo que iba más rápido. “No hubo mucho fair play de parte de él, se lo dije, pero todo bien”, dijo “Nanni”.
La sorpresa argentina la dio el debutante Federico Villagra, 11° en la general con Mini (llegó a estar segundo en un parcial). La decepción: el mendocino Lucio Álvarez, 130° por serios problemas con su Ford. El final para Robby Gordon: el showman estadounidense terminó 133 y llegó a la meta con su Gordini remolcado. (Especial)
¿Y qué dijo Sousa? Algo sorprendente. “Firmé un buen resultado, pero fue muy duro. Me quedé sin aire acondicionado y se bloquearon todas las entradas de ventilación. Además se dañó la salida de aire del turbo, por lo que el aire del motor llevó la temperatura del habitáculo a unos 70 grados, ¡casi no podía respirar! Creo que si manejé tan deprisa es porque quería acabar cuanto antes con el martirio”. Un detalle: el líder llegó a la meta al mando de un naftero, todo un logro en tiempos dakarianos en los que solo los vehículos diesel coparon la cima.
Nasser Al Attiyah, llegó 3° y muy conforme con su trabajo y con el andar del Mini. “Me encantó el especial, muy lindo y técnico”, se entusiasmó. No opinó lo mismo el español Carlos Sainz, 5° con un Buggy. “Fue un tramo sinuoso, lentísimo, de lo peor para mi coche.” El “Matador” no estaba de buen humor, sobre todo porque Joan Roma, 4° en la prueba, le reclamó por no dejarlo pasar siendo que iba más rápido. “No hubo mucho fair play de parte de él, se lo dije, pero todo bien”, dijo “Nanni”.
La sorpresa argentina la dio el debutante Federico Villagra, 11° en la general con Mini (llegó a estar segundo en un parcial). La decepción: el mendocino Lucio Álvarez, 130° por serios problemas con su Ford. El final para Robby Gordon: el showman estadounidense terminó 133 y llegó a la meta con su Gordini remolcado. (Especial)
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