Como esos viejos trabajadores enamorados de su labor, el cospel se resiste a jubilarse. Aunque ya está decidido que se lo reemplazará por la Tarjeta Ciudadana, la fecha de la puesta en marcha del nuevo sistema para pagar los viajes en colectivo -prevista para el sábado- aún está en duda. Los empresarios del transporte sostienen que hay demasiados problemas con la distribución de las tarjetas.
Ayer, la Asociación de Empresarios de Transporte Automotor
de Tucumán (Aetat) envió una misiva dirigida al intendente Domingo Amaya en la
que sostienen que no están dadas las condiciones para el
retiro de circulación del cospel y su reemplazo por la Tarjeta
Ciudadana.
Daniel Orell, gerente de Aetat relató que, este mediodía, representantes de la institución que nuclea a los
empresarios del transporte tucumano se reunieron con
el Subsecretario de Tránsito y Transporte, Juan Giovanniello, para debatir cuál es la situación con la que conviven a diario los
choferes.
"El principal problema radica en la deficiente
distribución de la tarjeta en los kioscos", dijo Orell. El representante de los empresarios responsabilizó a la distribuidora ATOS, que es la
adjudicataria de la concesión del servicio.
Desde Aetat sostienen que la utilización por parte del público
usuario de la tarjeta como nuevo medio de pago, es aún restringida y
limitada. Afirman que de los informes realizados por las empresas
asociadas , es posible determinar que actualmente sólo el 30% de los
viajes se abonan con tarjetas.
Mañana habrá una nueva reunión entre empresarios y funcionarios para definir si se posterga nuevamente la jubilación del cospel.