La burocracia y la tramitación del nuevo DNI

07 Abril 2014
Durante muchos años, varios de nuestros intelectuales más destacados polemizaron acerca del ser nacional, es decir saber quiénes somos verdaderamente los argentinos. Justamente, el conjunto de rasgos propios de un individuo o de una colectividad que los caracterizan frente a los demás se denomina identidad. Lo cierto es que la controversia perdura. No es fácil, por ejemplo, en nuestro Tucumán obtener, al menos, la identidad legal. En 2009, dimos a conocer el caso de una joven que había cumplido 18 años y nunca había logrado que el Registro Civil le otorgara su Documento Nacional de Identidad.

El Gobierno nacional ha dispuesto que a partir del 1° de enero de 2015, pasarán a retiro la Libreta Cívica, la de Enrolamiento y el DNI de tapa verde, que serán reemplazados por la tarjeta. Se estima que alrededor de 900.000 tucumanos deberán efectuar la reconversión en los restantes 270 que restan para concluir 2014. El nuevo documento deberá gestionarse en las 23 delegaciones del Registro Civil en el territorio provincial, incluidos los Centros de Documentación Rápida (CDR), donde puede obtenerse el DNI y el pasaporte. Del total de las sedes, en cinco de ellas funciona la asignación de turnos online. Según la directora del Registro Civil, se inician en la provincia, por día, entre 1.700 y 1.800 trámites para el nuevo DNI. De ese número, 700 turnos se asignan a través de internet. Anunció que se abrirán nuevos CDR en Trancas, Simoca, Tafí del Valle y Graneros, con lo que todas las localidades sedes de departamentos contarán con su oficina. La sede central del Registro Cilvil se trasladó a San Martín y Laprida porque el antiguo edificio de 24 de Septiembre al 500, se está refaccionando.

Pocas veces desde su implementación, el sistema de turno online ha funcionado con eficiencia. Ante el incremento de la demanda, se hace difícil lograr una fecha de atención. “La página sí funciona, lo que sucede es que la demanda es muy grande. Mucha gente entendió además que para ingresar al Registro Civil, independientemente del trámite, se requiere un turno por internet, cuando eso rige sólo para tramitar DNI en algunas sedes y CDR. La experiencia de internet alivia muchísimo la cola. Si por día se asignan 700 turnos, esa cantidad de gente ya no hace fila para ser atendida”, dijo la directora. Según un cálculo, para poder renovar los DNI hasta fin de año deberían efectuarse 3.320 trámites diarios, muchos más de los 1.800 que de realizan en la actualidad. Ello significa que va a resultar traumático para muchos comprovincianos llegar al 31 de diciembre con el nuevo DNI en la mano.

Una vez más pareciera imperar la imprevisión, es decir someter a los comprovincianos al disgusto para poder conseguir turnos, haciendo colas desde la madrugada como sucede habitualmente. Esta burocracia, propia no sólo de la administración pública, seguramente es motivo de desaliento en el ciudadano. ¿Qué sucederá con los mayores y los ancianos? ¿Habrá un trato especial o tendrán que fatigar la vereda para lograr un turno humano? ¿Qué funcionario se hará cargo de estas incomodidades o se responsabilizará por las horas perdidas para efectuar este trámite? ¿Cuándo se respetará el tiempo del otro que es justamente el que mantiene con su bolsillo al personal de las reparticiones? Sería positivo que lograr la identidad oficial no fuera tan complicado.

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