20 Junio 2014
EL JEFECITO. Mascherano se ganó su lugar en la Selección a fuerza de sacrificio. REUTERS
BELO HORIZONTE, Brasil.- El mediocampista de la Selección, Javier Mascherano jugará mañana su partido número 100 con la camiseta argentina, con la que debutó en 2003. El jugador, quien con los años se convirtió en pieza clave del equipo sea cual fuere el entrenador, jugó su primer encuentro frente a Uruguay, en el estadio ciudad de La Plata, el 16 de junio de 2003. En aquel momento, aún no había debutado en la Primera de River Plate.
El entrenador que le permitió debutar en la "albiceleste" fue Marcelo Bielsa, quien ya lo conocía porque el santafesino había sido sparring del seleccionado en el Mundial de Corea y Japón 2002. El enorme despliegue físico y la capacidad para cubrir todo el mediocampo y a la vez ser salida clara del equipo, convenció a todos los entrenadores desde 2003 a la fecha.
Fue importante para Bielsa, quien le dio la continuidad, luego para José Pekerman, con quien se convirtió en pieza fundamental por su empuje y por su entrega, y también para Diego Maradona, quien apenas asumió le dio la capitanía y afirmó que su equipo era "Mascherano y diez más".
Con algunos altos y bajos en su rendimiento, el volante de Barcelona justificó siempre, durante más de 10 años, que los diferentes entrenadores hayan apostado por él. El que afronta en Brasil es su tercer Mundial, ya que jugó en Alemania 2006 y en Sudáfrica 2010. Además, Mascherano es el único futbolista argentino que ganó dos Juegos Olímpicos, Atenas 2004 y Beijing 2008, el primero conducido por Bielsa y el otro, por Sergio Batista. (DyN)