17 Agosto 2014
El aguinaldo pasó sin pena ni gloria. Los comerciantes pueden dar fe de ello. Los consumidores efectuaron menos compras en efectivo, pero también se desaceleró con fuerza la venta con tarjetas de crédito, incluso en aquellos comercios que continuaron ofreciendo cuotas sin interés, informó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), al presentar su informe respecto de julio, con una caída del 9,6% en la comercialización de productos.
La retracción en la demanda se sintió todo el mes. Las vacaciones de invierno, junto a los cobros de aguinaldo y las subas se salarios cerrados en las paritarias de algunos sectores levantaron por momentos el consumo, pero no lo suficiente para cambiar la tendencia, indicaron desde esa organización.
El mundial de fútbol y la buena actuación del equipo nacional impulsó las compras de alimentos, bebidas, televisores, remeras, pelotas, y otros accesorios, pero fueron saltos momentáneos en la venta de artículos muy puntuales, que luego se apaciguaron.
El Banco Central (BCRA) también constató aquella baja del uso del “plástico”. Las financiaciones con tarjetas de crédito registraron un descenso de 3,9% ($ 3.540 millones) en el mes, aunque su variación interanual continúa en niveles elevados, ubicándose en 36,3%, informó la entidad en el último reporte sobre Informe Monetario de julio. “Parte de la disminución del mes estuvo explicada por la concentración de fuertes vencimientos de ciertas tarjetas destinadas, especialmente, a financiar la compra de productos, insumos y servicios de productores del sector agrícola y ganadero”, explicó. Adicionalmente, según el Central, la percepción del medio salario anual complementario suele motivar una merma en la demanda de préstamos personales y en los consumos con tarjetas de crédito, así como también la cancelación parcial de las deudas contraídas con las entidades emisoras de los “plásticos”. De acuerdo con el informe oficial, el financiamiento con tarjetas de crédito llegó a los $ 87.740 millones el mes pasado, lo que significó una caída intermensual del 3,9%. Sin embargo, al compararlo con julio de 2013, el financiamiento subió en torno de los $ 23.000 millones.
En cuanto a los préstamos personales, el volumen operado en julio fue de $ 104.000 millones, un 20% superior a igual mes del año pasado.
Respecto a las tasas de interés aplicadas sobre los préstamos en pesos al sector privado, las asociadas a las líneas comerciales y a los préstamos personales descendieron. En particular, el promedio mensual de la tasa de interés de los adelantos en cuenta corriente se ubicó en 30,7%, disminuyendo 1,5 unto porcentual en el mes, mientras que la tasa de interés de los préstamos personales promedió 37,4%, descendiendo 3,1 puntos porcentuales respecto de junio, de acuerdo con el informe del Banco Central
En cambio, la tasa de interés de los préstamos prendarios aumentó 0,8 punto, al ubicarse en 23,9%.
Respecto del Procreauto, el Banco de la Nación Argentina (BNA) otorgó, al mes de julio, préstamos personales por alrededor de $ 240 millones, correspondientes a, aproximadamente, 2.400 operaciones, indica el reporte oficial.
La retracción en la demanda se sintió todo el mes. Las vacaciones de invierno, junto a los cobros de aguinaldo y las subas se salarios cerrados en las paritarias de algunos sectores levantaron por momentos el consumo, pero no lo suficiente para cambiar la tendencia, indicaron desde esa organización.
El mundial de fútbol y la buena actuación del equipo nacional impulsó las compras de alimentos, bebidas, televisores, remeras, pelotas, y otros accesorios, pero fueron saltos momentáneos en la venta de artículos muy puntuales, que luego se apaciguaron.
El Banco Central (BCRA) también constató aquella baja del uso del “plástico”. Las financiaciones con tarjetas de crédito registraron un descenso de 3,9% ($ 3.540 millones) en el mes, aunque su variación interanual continúa en niveles elevados, ubicándose en 36,3%, informó la entidad en el último reporte sobre Informe Monetario de julio. “Parte de la disminución del mes estuvo explicada por la concentración de fuertes vencimientos de ciertas tarjetas destinadas, especialmente, a financiar la compra de productos, insumos y servicios de productores del sector agrícola y ganadero”, explicó. Adicionalmente, según el Central, la percepción del medio salario anual complementario suele motivar una merma en la demanda de préstamos personales y en los consumos con tarjetas de crédito, así como también la cancelación parcial de las deudas contraídas con las entidades emisoras de los “plásticos”. De acuerdo con el informe oficial, el financiamiento con tarjetas de crédito llegó a los $ 87.740 millones el mes pasado, lo que significó una caída intermensual del 3,9%. Sin embargo, al compararlo con julio de 2013, el financiamiento subió en torno de los $ 23.000 millones.
En cuanto a los préstamos personales, el volumen operado en julio fue de $ 104.000 millones, un 20% superior a igual mes del año pasado.
Respecto a las tasas de interés aplicadas sobre los préstamos en pesos al sector privado, las asociadas a las líneas comerciales y a los préstamos personales descendieron. En particular, el promedio mensual de la tasa de interés de los adelantos en cuenta corriente se ubicó en 30,7%, disminuyendo 1,5 unto porcentual en el mes, mientras que la tasa de interés de los préstamos personales promedió 37,4%, descendiendo 3,1 puntos porcentuales respecto de junio, de acuerdo con el informe del Banco Central
En cambio, la tasa de interés de los préstamos prendarios aumentó 0,8 punto, al ubicarse en 23,9%.
Respecto del Procreauto, el Banco de la Nación Argentina (BNA) otorgó, al mes de julio, préstamos personales por alrededor de $ 240 millones, correspondientes a, aproximadamente, 2.400 operaciones, indica el reporte oficial.
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