La tormenta destrozó canales, sacudió a la provincia y amenaza con volver

Calles destrozadas, puentes sin barandas, enormes cantidades de basura desparramada, barro por doquier y tránsito interrumpido, fueron algunas de las consecuencias que dejó la tormenta del viernes por la noche. Los vecinos estuvieron en vigilia por miedo a que los canales desbordados se lleven todo.

RÍO MUERTO. Los paredones que contenían el cauce cedieron por la persistente lluvia que cayó ayer a la madrugada. LA GACETA / FOTOS DE JOSE INESTA - INES QUINTEROS ORIO RÍO MUERTO. Los paredones que contenían el cauce cedieron por la persistente lluvia que cayó ayer a la madrugada. LA GACETA / FOTOS DE JOSE INESTA - INES QUINTEROS ORIO
08 Marzo 2015
Cuando ayer vieron el amanecer, despejado y con un sol radiante, todavía no había terminado la pesadilla para los Aparicio, a pesar de que el agua ya había ido de la casa. Se trata de una de las tantas familias que padecieron la violenta tormenta que se desató el viernes a la noche y que hizo desbordar a los canales Sur y Norte. Junto con el vapor que empezó a levantarse con las altas temperaturas matinales, esos vecinos que viven sobre Alfredo Guzmán casi Camino de Sirga trataban de sacar con palas el lodo que se había acumulado en todas las habitaciones y que también había vuelto intransitable la calle por la que se ingresa a su hogar.

Este panorama se repitió a lo largo de todo este desagüe, que separa San Miguel de Tucumán con Yerba Buena, y que está rodeado por barrios como Municipal, ATEP 2, Mutual Policial e Independencia, donde según informaron fuentes de Defensa Civil de la Provincia también sufrieron anegamientos. “Aunque no hubo evacuados, se desbordaron los canales Norte y Sur y se anegaron ciudades como Tafí Viejo, Yerba Buena, Las Talitas y Los Nogales, donde cayó una gran cantidad de agua”, confirmó Fernando Torres, titular de la mencionada repartición.

Lo que más preocupaba a los vecinos del barrio Mutual Provincial e Independencia, sin embargo, es que la correntada se llevó las barandas del puente ubicado en avenida Independencia y Alfredo Guzmán (lo mismo pasó en el cruce de Kirchner y Alfredo Guzmán). “En la esquina hay una escuela y el lunes los chicos necesitarán cruzar el puente que está sin la protección adecuada ¿Cómo harán? Esperamos que aunque sea venga alguien de Tránsito para hacer cruzar a los chicos y a los vecinos. Todas las mañana esto se transforma en un caos por la cantidad de autos que cruzan por acá”, indicó Franco Escobar, un vecino de la zona. Ivana Cáceres agregó que en esa intersección hace como 1 año que no funciona el semáforo.

Además de las barandas destrozadas, en los alrededores del canal había desparramada mucha basura, troncos y escombros que se desprendieron de las paredes del desagüe: todo ello fue arrastrado por la correntada que sobrepasó el canal cerca de la 1 de la madrugada de ayer. “La verdad es que dio miedo: el agua cubría de vereda a vereda. No había signos de que por allí estaba el canal y en algunas casas el agua cubrió hasta 1 metro y medio de altura”, describió Germán Paredes, otro vecino de la zona.

Según Marcelo Alonso, director de Higiene municipal, desde ayer a media mañana estaban trabajando en el canal Sur y en Jujuy al 1.400, que resultaron ser las zonas más afectadas de la Capital luego de la tormenta. “No tengo una estimación de cuántos camiones vamos sacando de basura, pero son muchos. Aunque lo más difícil es tratar de quitar el lodo de las calles”, describió el funcionario. Mientras que Miguel Vallejo, subdirector de Obras Públicas Municipal, comentó que durante varias horas tuvieron que cortar Alfredo Guzmán entre la calle Lavalle hasta la entrada del parque Guillermina, porque transitar por allí era peligroso por la cantidad barro.

“No queda nada”

La misma pesadilla se repitió también en los “alrededores del canal Norte: el agua desbordó el canal y llegó hasta las puertas de muchos hogares. “Pasada la medianoche el agua empezó a entrar en nuestra casilla. A la 1 ya no teníamos nada que hacer: la correntada se estaba llevando todo. Por ello tuvimos que resguardarnos. Cuando volvimos a las horas, ya no estaba ni mi casilla ni la de mis hijas. No nos queda nada”, relató Eva Prado, una mujer que vive frente al canal Norte, sobre la avenida San Ramón al 550. “Pedimos que por favor alguien nos ayude. Estuvimos cortando y quemando cubiertas para hacernos visibles. Pero ni siquiera con eso alguien se acercaron a ayudarnos”, dijo Laura Gutiérrez, hija de Eva.

Lectores de LA GACETA enviaron por Whatsapp numerosas fotos en la que se muestran calles que parecen ríos, con autos estancados y con el agua que les llega casi hasta el techo. Entre los ejemplos están las fotografías tomadas en Bolivia y Muñecas (“se veían olas que eran formadas por la correntada y el viento”), Perú y Balcrace, parque 9 de Julio, avenida Independencia al 3.800, avenida Roca y canal Sur, y Jujuy al 3.00, entre otros lugares.

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