31 Marzo 2015
TAPADO. Los problemas físicos de Tiger atentaron contra su carrera, hoy en caída. USA TODAY SPORTS (ARCHIVO)
LONDRES.- La debacle de Tiger Woods parece no tener fin y su castigo se reflejó ayer luego de que se publicara la actualización del ranking mundial de golf. Por primera vez desde 1996 está fuera del lote de los 100 mejores profesionales del planeta.
El ex número uno del mundo y 14 veces ganador de torneos major, quien no ha jugado desde su retiro en febrero pasado del Farmers Insurance Open, del PGA Tour, apareció ayer en el casillero 104 del escalafón mundial, liderado por el norirlandés Rory McIlroy.
El golfista de 39 años alcanzó el primer puesto del ranking por primera vez en 1997 y estuvo 683 semanas como número uno del mundo.
El último título importante del californiano fue el Abierto de Estados Unidos de 2008, pero en 2013 ganó cinco torneos del PGA Tour y encabezó el ranking en mayo de 2014, antes de sufrir problemas de lesiones y una pérdida vertiginosa de su nivel. Su espalda, además de sus problemas de swing, traicionaron a quien había sido llamado a ser el mejor golfista del la historia. Tiger era y es llamado a ser quien desbanque al mítico Jack Nicklaus, dueño de 18 majors.
En esa batalla por recuperarse Woods espera volver a jugar en el Masters de Augusta (Estados Unidos) de la próxima semana, el primer “major” del año. Allí fue donde ganó su primer grande en 1997 y donde comenzó a escribir su historia y a expandir el golf fuera del estereotipo de que el deporte era solo para clase social alta. (Especial)
El ex número uno del mundo y 14 veces ganador de torneos major, quien no ha jugado desde su retiro en febrero pasado del Farmers Insurance Open, del PGA Tour, apareció ayer en el casillero 104 del escalafón mundial, liderado por el norirlandés Rory McIlroy.
El golfista de 39 años alcanzó el primer puesto del ranking por primera vez en 1997 y estuvo 683 semanas como número uno del mundo.
El último título importante del californiano fue el Abierto de Estados Unidos de 2008, pero en 2013 ganó cinco torneos del PGA Tour y encabezó el ranking en mayo de 2014, antes de sufrir problemas de lesiones y una pérdida vertiginosa de su nivel. Su espalda, además de sus problemas de swing, traicionaron a quien había sido llamado a ser el mejor golfista del la historia. Tiger era y es llamado a ser quien desbanque al mítico Jack Nicklaus, dueño de 18 majors.
En esa batalla por recuperarse Woods espera volver a jugar en el Masters de Augusta (Estados Unidos) de la próxima semana, el primer “major” del año. Allí fue donde ganó su primer grande en 1997 y donde comenzó a escribir su historia y a expandir el golf fuera del estereotipo de que el deporte era solo para clase social alta. (Especial)