24 Octubre 2016
NO QUIERE NI VER. Bucci se seca el rostro con la camiseta una vez consumada la derrota en Puerto Madryn. El volante no mostró el nivel que venía teniendo. foto de daniel feldman (especial para la gaceta)
Tuvo una mala tarde en un escenario familiar. Uno de los jugadores con mejor pie en San Martín, se levantó con el izquierdo este domingo Puerto Madryn, la ciudad en la que vivió entre 2007 y 2008. Diego Bucci estuvo lejos de cumplir con la “ley del ex” en la goleada 4-0 a manos de Guillermo Brown.
“No hicimos nada, nada. Siento bronca e impotencia, jugamos un segundo tiempo para el olvido”, dijo el veterano mediocampista a LG Deportiva a la salida de un vestuario que se asemejó a un velorio, o al vestuario de un boxeador noqueado.
“Fue un mazazo… hay mucho dolor, nos dolerá hasta el próximo partido. Hay poco para destacar, no somos eso que fuimos en el segundo tiempo”, señaló Bucci, quien estuvo prácticamente “ausente” durante todo el partido y no logró alimentar en Puerto Madryn la usina futbolística del “Santo”, de por sí con pocas luces.
“Es la primera vez que nos quedamos sin respuesta; nosotros hemos estado en desventaja en determinadas situaciones y el equipo siempre tuvo respuestas anímicas, incluso en Misiones, pese a que también perdimos (3-0 con Crucero del Norte)”, puntualizó en una aguda autocrítica.
“Lamentablemente, hay poco para decir y mucho para pensar”, reflexionó Bucci, uno de los pocos jugadores de San Martín que se detuvo a hablar con la prensa una vez decretada la dura derrota que dejó al conjunto tucumano en el fondo de la tabla de los promedios.
En relación a los méritos de su rival, que quedó provisionalmente –a falta del partido Ferro Carril Oeste-Instituto de Córdoba en la noche de hoy- como único líder de la B Nacional, el volante de 34 años sostuvo: “Guillermo Brown los puntos los tiene y los partidos los ganó. Pero uno siempre intenta hablar de San Martín y nosotros no hicimos mérito para ganar este partido”.
Pese a la enorme frustración que le dejó el traspié en la Patagonia, Bucci rescató el afecto recibido en la visita a su ex club. “Saludé a la gente, a los empleados del club, a aquellos con los que he compartido el día a día en aquella época. Pasaron casi diez años y que esté siempre esa predisposición de la gente es importante para mí”.
Por su parte, Alexis Ferrero, quien se fue expulsado a los 72 minutos, reconoció haber pisado a un rival enseguida después de cometer una dura falta sobre el sustituto Santiago Giordana. El árbitro Nelson Sosa le sacó primero tarjeta amarilla e inmediatamente después la roja directa.
Ya en el primer tiempo el ex zaguero central de Colón de Santa Fe y River Plate se salvó de ver la tarjeta amarilla tras reclamarle airadamente al juez ante una falta cobrada a favor del equipo local.
Tras haberse duchado en un vestuario silencioso, los jugadores del “Santo” fueron subiendo uno a uno al micro que los conduciría al hotel. Al plantel le quedaba por delante una noche triste, a la espera de desandar los 1.900 kilómetros, por vía aérea, que lo separaban de La Ciudadela, a la espera de los próximos desafíos ante All Boys y Estudiantes de San Luis, ambos en condición de local.
“No hicimos nada, nada. Siento bronca e impotencia, jugamos un segundo tiempo para el olvido”, dijo el veterano mediocampista a LG Deportiva a la salida de un vestuario que se asemejó a un velorio, o al vestuario de un boxeador noqueado.
“Fue un mazazo… hay mucho dolor, nos dolerá hasta el próximo partido. Hay poco para destacar, no somos eso que fuimos en el segundo tiempo”, señaló Bucci, quien estuvo prácticamente “ausente” durante todo el partido y no logró alimentar en Puerto Madryn la usina futbolística del “Santo”, de por sí con pocas luces.
“Es la primera vez que nos quedamos sin respuesta; nosotros hemos estado en desventaja en determinadas situaciones y el equipo siempre tuvo respuestas anímicas, incluso en Misiones, pese a que también perdimos (3-0 con Crucero del Norte)”, puntualizó en una aguda autocrítica.
“Lamentablemente, hay poco para decir y mucho para pensar”, reflexionó Bucci, uno de los pocos jugadores de San Martín que se detuvo a hablar con la prensa una vez decretada la dura derrota que dejó al conjunto tucumano en el fondo de la tabla de los promedios.
En relación a los méritos de su rival, que quedó provisionalmente –a falta del partido Ferro Carril Oeste-Instituto de Córdoba en la noche de hoy- como único líder de la B Nacional, el volante de 34 años sostuvo: “Guillermo Brown los puntos los tiene y los partidos los ganó. Pero uno siempre intenta hablar de San Martín y nosotros no hicimos mérito para ganar este partido”.
Pese a la enorme frustración que le dejó el traspié en la Patagonia, Bucci rescató el afecto recibido en la visita a su ex club. “Saludé a la gente, a los empleados del club, a aquellos con los que he compartido el día a día en aquella época. Pasaron casi diez años y que esté siempre esa predisposición de la gente es importante para mí”.
Por su parte, Alexis Ferrero, quien se fue expulsado a los 72 minutos, reconoció haber pisado a un rival enseguida después de cometer una dura falta sobre el sustituto Santiago Giordana. El árbitro Nelson Sosa le sacó primero tarjeta amarilla e inmediatamente después la roja directa.
Ya en el primer tiempo el ex zaguero central de Colón de Santa Fe y River Plate se salvó de ver la tarjeta amarilla tras reclamarle airadamente al juez ante una falta cobrada a favor del equipo local.
Tras haberse duchado en un vestuario silencioso, los jugadores del “Santo” fueron subiendo uno a uno al micro que los conduciría al hotel. Al plantel le quedaba por delante una noche triste, a la espera de desandar los 1.900 kilómetros, por vía aérea, que lo separaban de La Ciudadela, a la espera de los próximos desafíos ante All Boys y Estudiantes de San Luis, ambos en condición de local.