Lavallén cambió el sistema de cara a la revancha entre Atlético y Junior

A LASTIMAR. Aliendro, que posa con un fan después del entrenamiento de ayer, será, junto con Leonel Di Plácido, quien deba perforar el flanco derecho de Junior. la gaceta / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO A LASTIMAR. Aliendro, que posa con un fan después del entrenamiento de ayer, será, junto con Leonel Di Plácido, quien deba perforar el flanco derecho de Junior. la gaceta / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO

El DT "Decano" ensayó con un 4-2-2, pero sin dejar de lado que el rival es un equipo rápido de contra.

21 Febrero 2017

El grupo empieza a concentrarse en el estadio Monumental, pasadas las 8 de un lunes 20 de febrero que tiene sabor a bienvenida a la recta final de un Atlético que encara con fe los días previos a volver a toparse con Junior, por la revancha de la fase 3 de la Copa, el próximo jueves, a las 19.15, allí en 25 de Mayo y Chile.

Pasa el loco, la entrada en calor, algunos movimientos físicos pedidos por el profesor Hernán Puerta y llega el turno de Pablo Lavallén. El técnico toma la batuta, carpeta en mano, y comienza con el reparto de pecheras. Entrega la de los titulares y hay una sorpresa. Un cambio, respecto al 0-1 sufrido en Cartagena la semana pasada.

Leandro González le cede su lugar entre los actores de rol a Cristian Menéndez. Pero que “LG” le haya servido el espacio al de Mar del Plata no significa que también entregó la posición con la que él obró en cancha. No.

Lavallén decidió cambiar, optar por otro dibujo táctico. Será el debut oficial del 4-4-2 de Atlético con Lavallén como entrenador, porque antes apenas cambió una vez el 4-1-4-1. Fue, precisamente, en el debut en la Libertadores, contra El Nacional, en el “José Fierro”. Esa noche de martes, el “Decano”, con un 4-3-3 como opción de salida, empató 2-2.

Que se entienda: esta será la primera vez que Atlético arrancará de movida jugando con el 4-4-2, pero eso no significa que el equipo no lo haya utilizado estando Lavallén en el cargo. Sí, lo hizo, pero porque el partido lo pidió así, caso la Revancha con El Nacional, cuando ya lo ganaba por 1-0.

¿Qué busca el DT con esa nueva propuesta? A priori, mayor contención por los costados y en el medio. Además, intentará potenciar la ofensiva con dos hombres. Menéndez, que no rindió ni en la altura de Quito ni en Cartagena, tiene la oportunidad de demostrar que tiene el ida y vuelta que el entrenador necesita de un delantero para este partido. Jugará retrasado.

Lo de Fernando Zampedri, en cambio, será esperar y pivotear por el centro del campo. Eso es lo suyo. Merodear el área o nutrir, de espaldas a los tres palos, a los carrileros que aparezcan por las bandas.

Está claro que Atlético necesita la victoria, pero mientras el tiempo esté de su lado, lo buscará con juicio. Junior es un rival difícil que demostró que sabe jugar con la pelota a los pies. Y más si esta viene nacida de un contraataque.

Un operativo de seguridad que contará con 270 policías

Si bien Atlético será prácticamente amo y señor de todo el estadio Monumental, porque no se prevé la llegada de muchos hinchas de Junior, la directiva del club, junto con el comité de seguridad deportiva y la Policía, diagramaron un fuerte operativo de seguridad. Y lo de fuerte no viene a colación porque habrá 270 efectivos, sino porque las acciones de prevención en las cercanías del “José Fierro” comenzarán mucho antes que en las horas previas a la revancha de la fase 3.

Es más, arrancará mañana el operativo. No habrá lugar para la famosa feria que sea realiza en la zona todas las semanas. Ni miércoles, ni jueves. Según informaron en el “Decano”, habrá controles de la municipalidad desde la medianoche del miércoles. Además, la apertura de la cancha está prevista para las 15, pero el servicio policial arrancará a las 13.

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