Por Nahuel Toledo
20 Septiembre 2021
BUSCA DE RESPALDO. En La Rioja, el Presidente se reunió con gobernadores y el flamante jefe de Gabinete para diagramar el futuro de la gestión. Twitter @alferdez
El nuevo gabinete que acompañará al presidente, Alberto Fernández, desde hoy en la gestión asumirá en medio de un contexto político convulsionado, luego de la derrota sufrida por el Frente de Todos (FdT) en las elecciones PASO, y un fuerte rechazo por parte de la oposición política.
Ante la crisis del Gobierno nacional, la dirigencia opositora se mostró cautelosa, en un primer momento. Pero, ante el conocimiento de los nuevos nombres del gabinete, las críticas no tardaron en llegar.
Además de asegurar que los cambios demostraron la injerencia de Cristina Fernández de Kirchner, los principales dardos apuntaron al regreso de Aníbal Fernández, a la continuidad de Santiago Cafiero en el Gobierno, pero está vez desde la Cancillería, y la irrupción del gobernador tucumano Juan Manzur como jefe de Gabinete.
La ex ministra de Seguridad y presidenta del PRO, Patricia Bullrich, fue una de las que cargó contra la gestión gubernamental por su sordera. “El Gobierno no escuchó a los argentinos”, aseveró en las redes sociales. Y detalló: “Manzur representa una de las provincias más pobres del país, (Aníbal) Fernández expresa lo peor del modelo de seguridad y Cafiero como canciller nos aleja definitivamente del mundo”.
Sobre la figura del mandatario provincial y las especulaciones que hoy rondan en relación a quién lo remplazará en el sillón de Lucas Córdoba, la dirigente nacional tuvo un apartado puntual. “Presidente: ofrecer cargos a un vicegobernador electo para que el elegido jefe de gabinete Juan Manzur pueda seguir “controlando” su provincia, es una práctica típica de un poder clientelar. La pagamos con el dinero público y viola la idoneidad constitucional para los cargos”, dijo desde su cuenta personal de Twitter. Y en otra publicación también le pidió a Alberto Fernández abstenerse de “entrometerse en el orden legal sucesorio de la provincia (en referencia a Tucumán) con plata de los argentinos. Es una negociación incompatible con la ética que deberían tener un presidente y un gobernador”, arremetió.
El peso de Cristina
“Ya no hay secretos. Cristina Kirchner lo hizo otra vez, impuso los nombres y la política al gobierno de Alberto Fernández”, postuló el titular del radicalismo, Alfredo Cornejo, en sus redes. El diputado nacional por Mendoza también ironizó por las diferencias en el FdT y compartió el video de campaña de Felipe Solá y Daniel Arroyo en 2015 donde apuntaban contra Aníbal Fernández. “Era con todos, no todos contra todos. Son diametralmente opuestos entre ellos y por eso no tienen un proyecto de país, sino un proyecto de poder”, enfatizó, para concluir: “En el medio, los argentinos”.
Mario Negri, otro de los pesos pesados del partido centenario, reprochó la llegada de Cafiero a la Cancillería y manifestó que ese organismo gubernamental “no es para un pasante”. “Es el cargo que mayor especialización y contactos exige. No pueden improvisar tanto. Tampoco parece buena idea poner de ministro de Seguridad a un funcionario célebre por decir que la inseguridad es una sensación. El plan es que no haya plan”, subrayó.
¿Mayores consecuencias?
El candidato a diputado nacional por La Libertad Avanza Javier Milei fue otras de las voces opositoras que se levantó en relación a los cambios y de manera contundente afirmó que “el nuevo Gabinete es peor que el que había, que ya era malo”. Sobre este punto, consideró también que el enfrentamiento entre las dos principales figuras del gobierno y las eventuales modificaciones ministeriales “pueden tener graves consecuencias institucionales”.
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