Programadores: una necesidad sin punto final

Argentina tiene un déficit de personal calificado para el sector tecnológico y ante esto cada vez son más las personas que copan cursos en distintas plataformas para conseguir trabajo.

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En tiempos totalmente mediados por la tecnología y frente a un mercado laboral que ofrece atractivos salarios con condiciones flexibles de trabajo, los cursos o carreras de programación ganan terreno entre aquellos ciudadanos que buscan una salida laboral rápida y rentable. Actualmente, el abanico de posibilidades es tan grande que los interesados pueden capacitarse con tutoriales de YouTube, distintas plataformas virtuales o hasta en universidades. Incluso, en la provincia, una legisladora presentó a finales del mes de agosto un proyecto de ley que solicita declarar la necesidad de brindar a los alumnos de las escuelas públicas de todos los niveles la enseñanza del lenguaje de programación y robótica como una política educativa y de desarrollo social. En diálogo con LA GACETA, el ingeniero y director de la empresa Silentium, Francisco Valdez, aseguró que recomendar un curso en particular puede resultar subjetivo, pero remarcó que a la hora de elegir es importante hacer lo que se hace al comprar algo en internet: fijarse en la reputación del ofertante.

-. ¿Qué le pasa a una persona que toma una de las opciones de Google y empieza a estudiar programación?

- Lo primero, en la desmitificación de la programación como una carrera fructífera y onerosa porque muchos subestiman que esto requiere de conocimientos y habilidades que debemos desarrollar. Uno en estas carreras cortas o tutoriales puede aprender ciertas bases, pero la realidad es que a la hora de profesionalizarlo se requiere mucha dedicación y esfuerzo para estar a la altura que requiere la industria. Entonces, sí hay una salida laboral inmediata, pero no es que hacés un curso de programación y a los seis vas a estar trabajando. Requiere mucho de la persona que estudia y de hacer el curso, pero también ponerle mucha dedicación en sus tiempos libres para aprender todo lo que sea tecnología y tener un punto de partida cuando consiga un trabajo.

-. ¿De qué depende el éxito de un programador?

- La proactividad y la capacidad de autoaprendizaje, son factores claves. En la década de los 90’, cuando aprendí a programar, el libro de programación, el material, era un recurso escaso. Entonces, vos cuando encontrabas un libro lo absorbías al máximo y practicabas lo más que podías. Hoy, tenés abundancia de información y lo que está pasando es que eso lleva a que por ahí uno no fortalece los contenidos que absorbe y termina siendo muy chato el nivel de profesionalización. La clave es encontrarle el gusto porque si a esto no lo hacés con pasión y amor no vas a triunfar en el mundo de la programación. La plata y los dólares que uno ve en los diarios es una consecuencia de ser bueno en lo que uno hace. Y lo primero que uno debe encontrar cuando se mete en este mundillo es ver si le gusta y encender su llama interior para transformar esto no solo en un medio de vida, sino también en un hobby que te haga estar un sábado o un domingo programando y aprendiendo porque es gigantesco el universo de capacidades que se pueden adquirir leyendo y aprendiendo.

-. ¿Hay mitos en torno a la programación?

- Sí, hay un problema a nivel mundial y tiene que ver con la escasez de programadores y es cierto que muchas empresas y organizaciones están buscando soluciones tecnológicas y buscando encontrar equipos de profesionales de programación en sus empresas y no hay. Si bien este proceso de tecnologización mundial empezó hace mucho se fue haciendo exponencial y llegamos a un punto donde la demanda supera a la oferta y eso provoca que tengás salarios que son excesivamente altos para puestos con poca trayectoria. Hoy en día un programador puede ganar más que un gerente de una multinacional, es una realidad. ¿Cuál es el mito? Que mucha gente piensa que por solo hacer un curso a los tres meses puede estar ganando en dólares y trabajando para afuera. Pero, la realidad es que el mercado internacional, busca programadores con perfiles de semi senior en adelante, con tres o más años de experiencia y con un nivel elevado de inglés para poder comunicarse con equipos de distintas partes del mundo. Entonces, hay un mito que se creó de que sos programador y ganas miles de dólares y no es así. Hay un trabajo donde en definitiva los programadores más capacitados y que más se forman y más trabajan en esta industria son los que pueden acceder a estas posiciones.

-. ¿Llegará el día que dejen de necesitarse en el mundo tecnológico?

- Llegará un punto donde la oferta supere a la demanda. Hoy en día pasa al revés, entonces se produce esta sensación de escasez que hace que los recursos se evalúen tan altos. Hace 10 años vos ponías un programa para formar programadores y se inscribían 10 personas, hoy en un programa estatal de formación de programadores se inscriben 6.000 personas. El día que la oferte supere a la demanda generará que la valuación del programador baje. La necesidad de programadores no se acabará, pero irremediablemente con este boom, la oferta superará a la demanda, entonces, quizás, en un momento deje de ser atractivo porque ya no será tan sencillo conseguir un trabajo. Cuando los programadores sean lo que vislumbramos que van a ser, los obreros digitales del día de mañana, porque si la tecnología hoy está presente como está, el día de mañana estará mucho más presente y los programadores y todos los que estén adentro de la industria 4.0 van a ser troncales.

Consultas frecuentes

Todo lo que tenés que saber para estar tranquilo

Todo curso vale

“Los contenidos de los cursos dependen de quienes los dicten y cuál es la misión de ellos. Hay academias que tienen un espíritu de formar estudiantes para que tengan una salida laboral inmediata, y otros que se centran en hacer una base de conocimiento para después seguir creciendo”.

Panorama encantador

Valdez reconoció que aquella persona que se inclina por la programación web se encuentra con un horizonte laboral más que atractivo. Además de buenos sueldos, este mercado ofrece trabajos que se caracteriza por ir al objetivo y no al control, lo cual modifica aspectos de laborales históricos.

¿Mito o realidad?

De que los sueldos son buenos y la oferta laboral es amplia, no hay dudas. Pero, Valdez remarcó que ganar en dólares y trabajar para empresas extranjeras no es para cualquiera. “Los programadores más capacitados y que más se forman y más trabajan en esta industria son los que pueden acceder”, dijo.

Formación estatal

El Gobierno nacional oficializó la creación de “Argentina Programa 4.0”, un plan que buscará formar a 70.000 programadores hacia fines de 2023. Según datos oficiales, la Argentina tiene un déficit constante de personal para el sector tecnológico estimado en 10.000 búsquedas anuales.

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