Los comerciantes fueron los más afectados por el paro de colectivos que continúa hoy

La medida de fuerza tomada por UTA alcanzó al centro tucumano. Escuelas cerradas, comercios con pocas ventas y mucha movilidad en taxi

PARADAS VACÍA, TAXIS COMPLETOS. Esta imagen fue la postal de la jornada de ayer, y puede repetirse hoy, en la segunda jornada de paro de UTA.  PARADAS VACÍA, TAXIS COMPLETOS. Esta imagen fue la postal de la jornada de ayer, y puede repetirse hoy, en la segunda jornada de paro de UTA. LA GACETA / FOTOS DE ANALÍA JARAMILLO
13 Octubre 2022

El primer día del paro de colectivos de 48 horas de la Unión de Tranviarios Automotor (UTA), que se extenderá hasta hoy por la imposibilidad de un acuerdo, repercutió de diferentes maneras en las actividades diarias. Los comercios abrieron con normalidad, aunque tuvieron ciertas dificultades. Los establecimientos educativos dictaron clases virtuales, presenciales o decidieron retomar mañana. Los más beneficiados fueron los taxistas.

Durante la mañana de ayer, el tránsito en la zona céntrica fue más pesado que otros días. Además, se pudo ver a una mayoría de taxis recorriendo las calles, mientras que muchas de sus paradas estaban vacías. Cerca del mediodía, el centro tucumano estaba marcado por un movimiento -podría decirse- normal; casi no se percibía la ausencia de gente yendo y viniendo de los locales de compras, en bares y negocios. Sin embargo, los comerciantes aseguraron que el paro de colectivos perjudicó en gran medida sus ventas.

“Todos los días se trabaja igual siendo taxista, siempre hay gente que necesita un viaje”, dijo Rubén Burgos, que compartió que el movimiento en la calle fue normal durante la mañana, ni más ni menos que en otras jornadas. También Carlos Jiménez, que aguardaba en una de las paradas de taxis del centro, comentó: “a la mañana temprano vi más gente, sobre todo en hospitales y bancos. Ahora hay menos movimiento, incluso vi algunos comercios cerrados, no anduvo mucha gente. Pero igual se trabaja mucho”.

Las escuelas públicas de la Capital cerraron sus puertas, mientras que algunos privados permanecieron abiertos. Al no haber clases, varios comercios se vieron afectados. “Nosotros dependemos mucho de los colegios, hoy no se vendió tanto”, dijo Emilse Cura, de un negocio de golosinas ubicado en la calle San Juan al 600. “Por lo general las escuelas privadas reciben a los alumnos que puedan asistir, pero la mayoría no puede por la falta de colectivos”, agregó.

Otra complicación fue la demanda de taxis. “Todos estaban ocupados. Además, se genera mucho tráfico porque todos vienen al centro”, aseguró Cura, a la vez que comentó que el traslado de ciudadanos en taxi también afectó a la venta en su kiosco. “Como no hay colectivos, la gente que viene en taxi pasa directamente a destino, no recorre las calles como en un día normal”, indicó.

Por su parte, Milagros Alderete, empleada de un comercio, no sólo destacó el bajo nivel de ventas de ayer por la mañana, sino que contó que tuvo que viajar desde Tafí Viejo hasta la Capital en taxi, lo que le costó $ 1.200. “Lo mismo tendré que gastar para volver, y también mañana. Siempre que hay paro es así, nos afecta un montón”, dijo a LA GACETA.

Analizó que, quizás, durante la tarde habría menos concurrencia de gente. “Hoy (por ayer) a la mañana hubo gente, pero venían a hacer trámites en los bancos u otras oficinas. Pero en general estuvieron bastante bajas las ventas, eso que esta zona suele ser muy movida, más que nada por los colegios. En toda la mañana no hubo la concurrencia que suele haber en un día de semana, supongo que a la tarde habrá mucho menos”, manifestó.

También Beatriz Borges, que vende flores en la peatonal, se vio perjudicada por la falta de colectivos. “Vengo desde El Manantial y gasté $ 1.500. Será el mismo gasto al volver y otra vez mañana. Pero bueno, hay que trabajar”, lamentó. Además, agregó: “se ve mucha menos gente, se siente mucho el paro. Ahora (cerca de las 11 de la mañana) se ve un poco más, pero temprano no había nadie. Afecta en general a todos; más que nada al comercio y a los que se movilizan en colectivo”.

En tanto, las universidades privadas y públicas trabajaron con distintas alternativas. “Siempre que hay paro de colectivos, depende la cátedra, algunos profesores dan clases virtuales y otros directamente no dictan. En este caso, algunas cátedras decidieron suspender todas las actividades y en el caso de que se levante el paro, dar clases normales”, dijo Camila, estudiante de una universidad pública. Asimismo, un establecimiento privado de la Capital priorizó la realización de actividades académicas presenciales, pese a la medida de fuerza tomada por UTA. (Producción periodística: Bárbara Nieva)

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