La Mesa de Enlace local, que reúne a los representantes de las entidades del campo, ratificó ayer en la sede de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT), ubicada en Cebil Redondo, la protesta que comenzará hoy con el cese de comercialización de granos. La medida de fuerza se acordó entre los referentes tucumanos, en sintonía con lo que impulsaron las autoridades de la Mesa de Enlace nacional, para reclamar a la Casa Rosada cambios en las políticas agropecuarias.

En el marco del plan de lucha que anunciaron, una de las iniciativas que surgió durante el encuentro fue la convocatoria, para el martes a las 9 en la sede de la entidad agraria, de una asamblea con productores tucumanos. Al mismo tiempo, avanzarán para solicitar al Gobierno la devolución de los saldos a favor que tienen muchos productores del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y de tributos provinciales. También insistirán en la necesidad de que las autoridades declaren la emergencia agropecuaria. Sebastián Robles Terán, titular de la SRT, explicó que el motivo de la protesta que, en principio se extenderá durante la próxima semana, es pedirle al Gobierno nacional que retome el diálogo con el sector productivo. "Queremos debatir los resultados de las políticas que aplica el Estado. Sería lamentable que después de este paro no tengamos una reunión con algún referente que tenga poder de decisión. Queremos discutir sobre hechos concretos: la disminución de la producción de cultivos como el trigo y la soja", remarcó.

Además, el dirigente afirmó que desde el año pasado, las entidades que integran la Mesa de Enlace nacional solicitan reuniones con el ministro de Agricultura de la Nación, Norberto Yauhar. "Hasta ahora no conseguimos respuestas, pese a que se mantienen los reclamos, como la falta de reglas claras para saber cuándo comercializar los productos y, como consecuencia de esto, la pérdida de la rentabilidad", afirmó. Robles Terán también se refirió al problema de la sequía, al definirlo como una dificultad adicional que afecta a los productores del norte, y en particular a los de Tucumán. "No es lo más preocupante. Lo importante es discutir las políticas agropecuarias. Aunque el año que viene haya más lluvias, si continúan las mismas políticas desaparecerán más productores", insistió.

Los reclamos

El titular de la SRT manifestó que lo primero que el Gobierno debe analizar es el efecto de la inflación sobre los costos de producción. "También hay que ajustar los tipos de cambio retrasados, ya que los productores tenemos un tipo de cambio para pagar los insumos, otro para recibir la mercadería, y otro para pagar los impuestos", subrayó. E identificó como otro de los problemas que afronta el sector a la intervención del Gobierno en el mercado de granos. "Esto hace que el productor no pueda planificar su flujo de ingresos", agregó. Por otro lado, señaló que el Gobierno debe resolver dificultades pendientes relacionadas con impositivas. "Hay productores que están fundidos y que tienen a su favor saldos de IVA del año pasado", reforzó Robles Terán.

Reunión en la SRT

Como parte de la protesta del campo, los productores informaron que revisarán en la asamblea del martes las dificultades que atraviesan, así como la necesidad de declarar la emergencia agropecuaria, tanto en la provincia como en el país, para afrontar el impacto negativo de la sequía. A propósito, el productor autoconvocado, Maximiliano Alcocer, aseguró que la falta de lluvias ya afectó los cultivos de invierno. "Los productores tienen las semillas, pero al no tener el suelo la humedad necesaria no se podrá cultivar", explicó.

El ruralista señaló, además, que a causa de la escasez de lluvia y de las elevadas temperaturas, la situación de los productores del norte, en especial de Tucumán, es más grave que en el resto de las áreas productivas del país. "Hay tucumanos que sembraron en la zona oeste de Santiago del Estero. Allí, directamente, muchos campos no fueron cosechados, y las pérdidas, en promedio, rondan el 60%", afirmó.

Alcocer remarcó que, para superar el daño de la sequía se requieren acciones dinámicas por parte del Estado. "El país necesita del sector agropecuario para la elaboración de alimentos, y para generar ingresos. Por eso, no deberían desampararnos en esta situación. Al Gobierno le conviene que el próximo año podamos producir nuevamente", concluyó.