Inquietud por los cambios de fondo en la Ley de Biocombustibles

En el proyecto de la ley ómnibus, la gestión del presidente Javier Milei plantea un cambio total de las reglas de juego referidas a la producción del sector.

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El Centro Azucarero Argentino y la Cámara de Bioetanol de Maíz propusieron ayer a la Secretaría de Energía de la Nación un plan de desarrollo alineado con las políticas de descarbonización del transporte, introduciendo mecanismos de competencia y de libre mercado. “Creemos que, en lo relacionado a Bioetanol, el Proyecto de Ley del Poder Ejecutivo presenta numerosos inconvenientes por lo que queremos abrir el debate con ejes que incluyan más valor agregado federal, más sustentabilidad, y más desarrollo en un marco de mayor competencia y desregulación de la actividad”, dijeron las entidades en un comunicado.

En el proyecto de la ley ómnibus, la gestión del presidente Javier Milei plantea un cambio total de las reglas de juego referidas a la producción de biocombustibles. Entre otras modificaciones, el Gobierno propicia la apertura de las importaciones de biocombustibles, la eliminación del sistema de cupos por empresa para el abastecimiento, el permiso a las petroleras para participar del negocio y la desregulación del precio, que ya no será fijado por la Secretaría de Energía, sino por acuerdos entre privados. También impone porcentajes mínimos de mezcla. En la actualidad el corte está en 7,5% para el biodiésel y en 12% en el bioetanol.

Con la firma de Jorge Feijoó, por el Centro Azucarero Argentino, y de Patrick Adam, como director ejecutivo de la Cámara de Bioetanol de Maíz, ambas entidades señalaron que “es igualmente importante respetar todas las condiciones actuales de producción y comercialización para aquellos que invirtieron bajo el actual régimen, garantizando la plena seguridad jurídica de las empresas, una condición sine qua non para el desarrollo de cualquier país”. “Es con este espíritu constructivo que realizaremos todas las contribuciones necesarias para que las revisiones que se realicen al proyecto de ley de bioetanol redunden en progresos ciertos para la producción, el medio ambiente y el entramado socioeconómico de la Argentina”, agregaron.

El proyecto del sector privado propone una Convergencia Técnica con el Mercosur, llevando el contenido mandatorio de bioetanol de producción nacional a un rango de entre 18% y 27%, con mecanismos de competencia abierta, tanto en volumen como en precio, y habilitar un mercado libre de bioetanol para cortes superiores al 27%. Las 20 plantas elaboradoras de bioetanol de caña de azúcar y de maíz, radicadas en siete provincias argentinas, son el resultado de más de 1.000 millones de dólares de inversión en el marco de normas que estimularon el uso de bioetanol para contribuir eficazmente a una reducción emisiones en el transporte vehicular, agregar valor a las materias primas y avanzar en una mayor soberanía energética, remarcan en el comunicado.

Mientras se busca desregular la actividad del biocombustible, en el Boletín Oficial de la Nación se publicó ayer un fuerte incremento en el valor del biocombustible estimado en un 34%.

Para el bioetanol elaborado con caña de azúcar, se fijó en $ 465,84 por litro el precio, apenas por encima del etanol de maíz, fijado desde ahora en $ 463,91 por litro, de acuerdo con lo establecido en la Resolución 4/2023 firmada por el secretario de Energía de la Nación, Eduardo Javier Rodriguez Chirillo.

En este caso, el precio vigente hasta la publicación de la resolución era de $348,50 y $ 361,10 por litro respectivamente.

En tanto, el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) expresó su "profunda preocupación y rechazo a la Sección VI (Derechos de Exportación)" del proyecto de ley "Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos" remitido por el Poder Ejecutivo al Congreso de la Nación.

En un comunicado, la CAA reiteró que "este tipo de proyectos con subas de derechos de exportación son contradictorios con la generación de empleo, producción y exportaciones que ha expresado el gobierno".

"Si bien se comparte la necesidad de alcanzar el equilibrio fiscal, dicho objetivo no sucederá aumentando impuestos a economías regionales agroindustriales y otras cadenas de valor agroindustriales exportadoras como carnes, pesca, complejo industrial de la soja y del trigo, entre otros", destacó la entidad agroindustrial.

El CAA alertará de esta errónea decisión a los legisladores y procurará que se corrija y elimine la suba de derechos y demás medidas previstas en la Sección VI del mencionado proyecto ley. Mas aun, el CAA recuerda que el gobierno entrante anuncio en su campaña que iba a eliminar la facultad del Poder Ejecutivo de imponer derechos de exportación y que procedería a no imponer este tipo de impuestos. En el caso del sector citrícola, el Gobierno ha disminuido del 15% al 8% la alícuota de los derechos de exportación para el aceite esencial del limón, pero habrá cero retenciones para el caso de la fruta fresca del jugo y de otros derivados de la actividad.

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