Por Marcelo Androetto
12 Febrero 2024
VOLVER A SER. Estigarribia frente a Barracas volvió a desperdiciar un par de situaciones claras. Matias Nápoli Escalero - Enviado especial para LA GACETA.
“Volví al campo de juego a jugar el segundo tiempo con lágrimas en los ojos”. La confesión de Marcelo Estigarribia exime de mayores comentarios, habla por sí misma del estado de situación –anímico y futbolístico- de un Atlético Tucumán que ha iniciado el año dando pasos en falso.
Hasta ahora de local viene jugando aceptablemente bien, pero su falta de efectividad lo condena al empate (ante Rosario Central y Argentinos Juniors). Y de visitante se derrumba tras la primera vicisitud (Instituto y Barracas Central).
Incluso este domingo en cancha de Huracán estuvo a punto de encajar una segunda goleada en una Copa de la Liga que tras cuatro fechas tiene al “Decano” prácticamente en el sótano de la Zona A. Por si faltara algo, ahora le toca River, el líder que viene pisando fuerte.
Mientras Sergio Gómez y Favio Orsi, naturalmente cariacontecidos, en conferencia de prensa daban sus razones sobre una nueva decepción, los jugadores uno a uno iban saliendo del vestuario y subiendo al micro con la mirada perdida, tanto como pareció estarlo el equipo durante gran parte del cotejo ganado 2-0 por el “Guapo”.
Muy pocos se detuvieron a hablar con la prensa (no lo hizo el capitán Joaquín Pereyra, pese a la requisitoria periodística). Estigarribia habitualmente es una excepción a este “silenzio stampa” pos derrotas.
“Me hago cargo de la situación, doy la cara cuando la tengo que dar”, afirmó el delantero en el hall principal del “Palacio Tomás Ducó”.
“Me duele mucho este momento porque siento el fútbol desde muy adentro, me duele porque esto es mi laburo, me duele por toda la gente que está detrás de nosotros, que va al estadio y nos banca…”, se explayó el “Chelo”, un tipo honesto con sus emociones y habitualmente sincero a la hora de declarar.
A Estigarribia, quien frente a Barracas volvió a desperdiciar un par de situaciones claras y continúa con la pólvora mojada en este torneo, se lo percibía movilizado por otra mala actuación en lo individual y colectivo, y dejó varias frases contundentes, de las que invitan a ser desmenuzadas.
El concepto, la necesidad, la exhortación que más repitió ante los micrófonos fue a “hacerse cargo” de este mal momento del “Deca”.
¿Cómo? “Como tiene que hacerlo un equipo profesional, de hombres”. ¿De qué? “De que estamos mal. Otra vez tuvimos una noche en que sentimos el golpe y nos costó levantarnos. Tenemos que hacer autocritica”.
Tras mencionar que hay cosas que “no pueden pasar” (por ejemplo, el primer gol de Barracas, que provino de un lateral), Estigarribia apuntó a aspectos psicológicos, en coincidencia con la apreciación que momentos antes había realizado la dupla técnica.
“El equipo está sufriendo mucho desde lo mental, generamos situaciones y no las podemos meter… tenemos que cambiar la cabeza, intentar volver a ser el equipo del año pasado”.
El “Chelo” intentó deslindar de responsabilidades a los entrenadores por este muy opaco presente del equipo. “He visto muchos ‘golpes’ al cuerpo técnico… el tema pasa por nosotros; los técnicos, más allá de que trabajen, llegan hasta la línea de afuera, los que entramos somos nosotros y está faltando una vuelta de rosca, totalmente nuestra”.
¿Y en lo personal? ¿Cómo hacer para cortar la sequía? “Es una pregunta complicada, porque si hubiera cosas para hacer ya las habría hecho. Tengo que mantener la tranquilidad, no volverme loco y seguir intentándolo como lo hago siempre”, respondió.
Estigarribia espera volver pronto a las buenas sensaciones de la temporada pasada.
“Me tocó convertir goles importantes… en los peores momentos nuestros yo aparecí y convertí. Y salimos del pozo en que estábamos. Incluso en la Copa de la Liga volví después de la lesión y también aporté lo mío”.
“Ahora me está tocando pasar este momento. Más allá de que vuelva a errar y no pueda convertir, sigo entrenando e intentando. En dos días volvemos a jugar, el miércoles tenemos una revancha, no tengo otra cosa que intentar reponerme”, sostuvo.
Precisamente, en relación al encuentro con el “Millonario” en el “José Fierro”, el “Chelo” admitió: “La gente va a estar impaciente y enojada, y tiene razón. Este es un club que exige mucho, grande, con mucha gente. Volver a vivir este tipo de situaciones… y la verdad que no puede ser. El miércoles vamos a salir a dar otro tipo de imagen”.
Según las palabras de Estigarribia, el domingo les habrá costado tanto a él como a sus compañeros conciliar el sueño. “Nadie puede dormir después de estas cosas”, dijo.
Después sobrevendría una “charla profunda, seguramente”. Todo con un único objetivo, que tiene suma premura para Atlético: “Volver a las cosas que en el torneo pasado nos dieron muchos puntos”.
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