El riesgo país, indicador de la confianza inversora que elabora el banco JP Morgan, registró este martes un salto de 100 puntos básicos y se ubicó en 829 unidades, el nivel más alto desde abril.
La escalada se produjo en un contexto de fuerte tensión política, atravesado por el enfrentamiento de la gestión libertaria con los bancos y el escándalo en la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), que golpeó de lleno en el corazón del gobierno de Javier Milei.
El impacto en la economía no tardó en reflejarse: los títulos públicos cayeron hasta un 3,5% y el castigo también alcanzó a las acciones.
Para el Ministerio de Economía, el aumento del riesgo país representa un duro revés, ya que la cartera necesita que el índice se reduzca de manera sostenida a la franja de 300/400 puntos para poder encarar la refinanciación de los compromisos en dólares que vencen en 2026. Por ahora, ese objetivo aparece lejano.
Mientras tanto, en la Casa Rosada confían en que la incertidumbre electoral comience a disiparse en las próximas semanas y permita abrir margen para una recomposición. Sin embargo, antes de proyectar a mediano plazo, el Gobierno enfrenta una urgencia inmediata: esta misma semana vencen 13,7 billones de pesos en deuda doméstica.






















