Racing profundizó la crisis de River, lo eliminó y lo dejó con un pie afuera de la Libertadores 2026
El "Millonario" tocó fondo al perder con la "Academia" en la última jugada del partido. De esta forma, el "Muñeco" Gallardo atraviesa su peor momento desde que es el entrenador del conjunto de Núñez.
Racing Ciub protagonizó una de esas noches que quedan grabadas en la memoria de su gente y que, al mismo tiempo, exponen crudamente el momento del rival. En el Cilindro de Avellaneda, la “Academia” derrotó por 3 a 2 a River Plate en un partidazo vibrante y lo eliminó en los octavos de final del Torneo Clausura. Pero el impacto del resultado va mucho más allá de la clasificación: el equipo de Marcelo Gallardo cerró un 2025 para el olvido, profundizó su crisis futbolística y quedó al borde de quedarse afuera de la Copa Libertadores 2026.
La historia empezó con Racing tomando la iniciativa y encontrando el primero a través de Santiago Solari. Sin embargo, el “Millonario” reaccionó con una ráfaga inesperada. En apenas segundos, dos ingresados desde el banco, Ian Subiabre y Juan Fernando Quintero, dieron vuelta el marcador y encendieron una ilusión breve, casi ilusoria. Porque River, fiel a su temporada irregular, no logró sostener el control ni emocional ni futbolístico. Apenas un par de minutos después, un potente remate de Adrián Fernández -que se desvió fatalmente en Lucas Martínez Quarta- devolvió la igualdad. Y en el cierre, cuando todo parecía encaminarse al alargue, apareció Gastón Martirena para convertir el 3-2 definitivo y desatar la locura en Avellaneda.
“Contento porque son desafíos que siempre afronté. Nosotros siempre vamos al frente… hoy me tocó a mí”, señaló el héroe de la noche tras su gol agónico, que depositó a Racing en los cuartos de final, donde espera al ganador de Lanús-Tigre.
Del otro lado, la sensación es diametralmente opuesta. River volvió a mostrar las mismas falencias que arrastra desde comienzos de año: fragilidad defensiva, escasa reacción colectiva y una alarmante desconexión en los momentos clave. Gallardo, que había regresado al club para liderar un nuevo proyecto, atraviesa su etapa más compleja desde su retorno. El equipo no encontró regularidad, quedó tempranamente afuera en varias competencias y ahora termina el 2025 sin trofeos y con su continuidad envuelta en incertidumbre.
La derrota ante Racing no solo lo elimina del Clausura: también lo deja prácticamente sin Copa Libertadores. Antes de los octavos, River dependía de sí mismo para clasificar al torneo continental, pero para eso debía consagrarse campeón. Ahora, su única vía es rezar por un resultado externo: que Argentinos, Boca o Lanús sean campeones del Clausura. Solo así se liberará un cupo que permitiría al “Millonario” acceder al repechaje como cuarto de la tabla anual.
River cierra así un año en el que nunca encontró rumbo, mientras Racing celebra otro triunfo heroico que lo impulsa hacia la ilusión de volver a pelear por el título.




















