El Vaticano apoya el plan de Obama contra las armas

El Presidente insiste con sus proyectos de ley

20 Enero 2013
WASHINGTON/CIUDAD DEL VATICANO.- El Vaticano apoyó ayer la lucha anunciada por el presidente estadounidense, Barack Obama, por el control de la venta, y contra la proliferación y la portación de armas en ese país. "Es necesario repetir, sin cansarse jamás, los llamamientos para el desarme, para contrarrestar la producción, el comercio y el contrabando de armas", afirmó el vocero de Benedicto XVI, el padre Federico Lombardi, en la editorial semanal del Centro Televisivo Vaticano.

El sacerdote expresamente se pronunció a favor de la iniciativa de Obama para sancionar una ley restrictiva del derecho constitucional norteamericano de tener armas. "Si se alcanzan los resultados, como las adhesiones a las convenciones internacionales, la prohibición de las minas y la reducción del número inmenso de cabezas nucleares, bienvenido. Pero las armas son y serán siempre demasiadas. Las iniciativas anunciadas por el Gobierno estadounidense para las limitaciones y el control de la difusión y del uso de armas son ciertamente un paso en la justa dirección", resaltó.

El vocero de la Iglesia advirtió: "nadie puede ilusionarse con que (con las futuras normas) se puedan impedir en el futuro matanzas horrendas como la de Newtown, que sacudió la conciencia estadounidense y mundial, pero mucho peor sería contentarse sólo con palabras". Su referencia es a la masacre de niños en una escuela de esa localidad en Connecticut, que motivó el debate legislativo en EEUU.

También ayer, Obama defendió sus propuestas de ley, a las que calificó "de sentido común", como la obligación de comprobar los antecedentes de los compradores; la prohibición de vender fusiles de asalto, y el incremento de la cantidad de policías. "Hasta el 40% de las ventas se realizan sin que los comerciantes comprueben el pasado de los clientes. Ese comportamiento es poco inteligente, es arriesgado y es irresponsable. Cualquiera que intente comprar un arma debe demostrar que no es un convicto", resaltó.

El Presidente reconoció que "nada de esto será fácil" de aprobar, y pidió a los estadounidenses que se desvinculen de "los grupos de presión, de los violentos y de los políticos que califican cualquier intento de reformas como un ataque a la libertad para conseguir más audiencia y más dinero".

Nuevo período
El mandatario demócrata jurará en privado hoy su cargo, dando comienzo formal así a su segundo mandato consecutivo. La ceremonia institucional tendrá lugar mañana, en Washington, donde se están ajustando los últimos detalles. 

Este acto tendrá un tono más moderado que en su histórico juramento de hace cuatro años, y se espera que sea seguido en las cercanías del Capitolio por unas 800.000 personas (menos de la mitad que en 2008). El alto desempleo y las luchas partidistas sobre las políticas fiscales han agotado en algunos la esperanza que marcó la anterior toma de posesión del primer mandatario de raza negra de Estados Unidos.

Hoy, Obama cumplirá con la ceremonia de dejar una ofrenda floral en el Cementerio Nacional de Arlington, y al mediodía jurará oficialmente en la Casa Blanca, cumpliendo así con el requisito constitucional que estipula que lo haga el 20 de enero. Este evento no será público y sólo contará con la presencia de miembros de su familia, colaboradores cercanos y medios de comunicación. (Télam-Reuters)

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