14 Abril 2013
Investigan a 18 policías por el millonario robo a una casa del country del "Jockey Club"
Por las huellas dactilares identificaron a un sospechoso, que el día del hecho estaba detenido en la Dirección General de Investigaciones. Los uniformados habrían encubierto al delincuente que se llevó U$S 250.000 y $ 500.000 de la casa de María Julia Paz
CONTROL Y VIGILANCIA. En el acceso al country "Jockey Club", la guardia no observó movimientos en la vivienda de Julia María Paz, donde los ladrones entraron en septiembre de 2012. LA GACETA / FOTO DE JOSE NUNO (ARCHIVO)
La investigación se manejó bajo la más estricta reserva. No era para menos. La sospecha se había centrado sobre policías, quienes habrían permitido que presos salieran de sus celdas para robar. Los efectivos, según esta hipótesis, se quedaban con gran parte del botín.
El origen de la pesquisa fue el robo que sufrió Julia María Paz en septiembre del año pasado, en su casa del country "Jockey Club", en Yerba Buena. La investigación de la fiscala de Instrucción de la VIII° Nominación, Adriana Giannoni, derivó en varios allanamientos en las casas de policías. Los últimos se realizaron el sábado 6 de abril, y se secuestró dinero.
Paz, hermana de la ex tenista Mercedes Paz, se había ausentado de su vivienda el viernes 14 de septiembre de 2012 al mediodía. Cuando regresó el domingo siguiente, a las 19, al barrio privado, descubrió que le habían robado una caja de seguridad móvil que tenía en un placard.
Las sospechas habían girado en torno a la empleada doméstica, quien tenía llave de la casa. La mujer estuvo detenida en la Brigada Femenina, pero en los allanamientos realizados por la Policía no se pudo encontrar elementos que fundamenten una acusación. A principios de octubre, recuperó la libertad.
Conexión policial
Aunque la causa se encuentra bajo secreto de sumario, fuentes de la investigación confirmaron que los peritos habían hallado una huella dactilar en el lugar del robo. Giannoni envió esa prueba a Buenos Aires, donde fue cotejada a través del Sistema Federal de Identificación Biométrica (Sibios) dependiente del Ministerio de Justicia de la Nación.
A fines de febrero, el resultado arrojó como resultado a un sospechoso. Al verificar su identidad, la fiscala descubrió que se trataba de un hombre sobre el que pesaba un pedido de prisión preventiva por un robo agravado, y que en la fecha en que se produjo el caso del "Jockey Club" estaba alojado en la alcaidía de la Dirección General de Investigaciones.
La representante del ministerio Público llevó adelante allanamientos en las viviendas de los 18 policías que estuvieron de guardia durante el fin de semana en que se produjo el robo. Las medidas fueron realizadas con el auxilio del Departamento de Inteligencia Criminal (D2).
La Justicia decretó el lunes pasado el secreto de sumario de la causa, que se mantendría hasta el viernes próximo. Los jefes policiales se mantienen cautos a la hora de brindar información. "Es una investigación grande", afirmó una fuente tribunalicia.
Tanto las autoridades del ministerio de Seguridad Ciudadana de la Provincia, encabezado por Jorge Gassenbauer, como el jefe de Policía Jorge Racedo, están al tanto de las medidas, de acuerdo a la información de las fuentes. Luego de que se obtuviera el dato a través del Sibios, la Nación le ofreció a Giannoni que trabajara con Gendarmería Nacional, ya que los principales sospechosos pertenecen a la Policía. Pero las autoridades provinciales garantizaron que la información no se iba a filtrar entre los efectivos. De hecho, según comentó una de las fuentes consultadas, los policías se mostraron sorprendidos cuando llegaban a allanarles sus viviendas.
En los operativos llamó la atención el hallazgo de dinero en moneda extranjera. En la casa de un policía guardaban dólares y euros. Una de las hipótesis de la investigación es que se estaría frente a un modus operandi, que alcanzaría también a otras dependencias policiales, según los testimonios que algunos de los policías habrían brindado en la última semana en la fiscalía. El robo al country no sería excepcional. La actividad de los efectivos no se habría acabado con dejarlos libres por unas horas, sino que se sospecha que les indicaban los lugares en los que debían llevar a cabo el atraco. Además, la fiscala no cree que los policías hayan podido actuar sin la venia de sus superiores.
De corroborarse las sospechas de Giannoni, la investigación podría alcanzar a jefes de dependencias. Lo seguro es que la causa golpeará fuerte en la fuerza policial.
El origen de la pesquisa fue el robo que sufrió Julia María Paz en septiembre del año pasado, en su casa del country "Jockey Club", en Yerba Buena. La investigación de la fiscala de Instrucción de la VIII° Nominación, Adriana Giannoni, derivó en varios allanamientos en las casas de policías. Los últimos se realizaron el sábado 6 de abril, y se secuestró dinero.
Paz, hermana de la ex tenista Mercedes Paz, se había ausentado de su vivienda el viernes 14 de septiembre de 2012 al mediodía. Cuando regresó el domingo siguiente, a las 19, al barrio privado, descubrió que le habían robado una caja de seguridad móvil que tenía en un placard.
Las sospechas habían girado en torno a la empleada doméstica, quien tenía llave de la casa. La mujer estuvo detenida en la Brigada Femenina, pero en los allanamientos realizados por la Policía no se pudo encontrar elementos que fundamenten una acusación. A principios de octubre, recuperó la libertad.
Conexión policial
Aunque la causa se encuentra bajo secreto de sumario, fuentes de la investigación confirmaron que los peritos habían hallado una huella dactilar en el lugar del robo. Giannoni envió esa prueba a Buenos Aires, donde fue cotejada a través del Sistema Federal de Identificación Biométrica (Sibios) dependiente del Ministerio de Justicia de la Nación.
A fines de febrero, el resultado arrojó como resultado a un sospechoso. Al verificar su identidad, la fiscala descubrió que se trataba de un hombre sobre el que pesaba un pedido de prisión preventiva por un robo agravado, y que en la fecha en que se produjo el caso del "Jockey Club" estaba alojado en la alcaidía de la Dirección General de Investigaciones.
La representante del ministerio Público llevó adelante allanamientos en las viviendas de los 18 policías que estuvieron de guardia durante el fin de semana en que se produjo el robo. Las medidas fueron realizadas con el auxilio del Departamento de Inteligencia Criminal (D2).
La Justicia decretó el lunes pasado el secreto de sumario de la causa, que se mantendría hasta el viernes próximo. Los jefes policiales se mantienen cautos a la hora de brindar información. "Es una investigación grande", afirmó una fuente tribunalicia.
Tanto las autoridades del ministerio de Seguridad Ciudadana de la Provincia, encabezado por Jorge Gassenbauer, como el jefe de Policía Jorge Racedo, están al tanto de las medidas, de acuerdo a la información de las fuentes. Luego de que se obtuviera el dato a través del Sibios, la Nación le ofreció a Giannoni que trabajara con Gendarmería Nacional, ya que los principales sospechosos pertenecen a la Policía. Pero las autoridades provinciales garantizaron que la información no se iba a filtrar entre los efectivos. De hecho, según comentó una de las fuentes consultadas, los policías se mostraron sorprendidos cuando llegaban a allanarles sus viviendas.
En los operativos llamó la atención el hallazgo de dinero en moneda extranjera. En la casa de un policía guardaban dólares y euros. Una de las hipótesis de la investigación es que se estaría frente a un modus operandi, que alcanzaría también a otras dependencias policiales, según los testimonios que algunos de los policías habrían brindado en la última semana en la fiscalía. El robo al country no sería excepcional. La actividad de los efectivos no se habría acabado con dejarlos libres por unas horas, sino que se sospecha que les indicaban los lugares en los que debían llevar a cabo el atraco. Además, la fiscala no cree que los policías hayan podido actuar sin la venia de sus superiores.
De corroborarse las sospechas de Giannoni, la investigación podría alcanzar a jefes de dependencias. Lo seguro es que la causa golpeará fuerte en la fuerza policial.