19 Abril 2013
Cadena de favores. Ni más ni menos. La historia de Lorena Barraza despertó toda clase de muestras de solidaridad de los tucumanos y de lectores de otros países que se conmovieron cuando leyeron la crónica por la web.
El miércoles, LA GACETA publicó el padecimiento de la familia de Lorena, quien sufre de parálisis cerebral y escoliosis. Ella tiene 24 años y pesa 17 kilos. La única forma de alimentarse es a través de un botón gástrico. Pero cada año sus padres, Teresita y Juan Barraza, deben peregrinar por el PAMI para solicitarlo. No sólo demoran meses, sino que les mandan una marca que el cuerpo de Lorena rechaza. Lo grave es que el que tiene se venció en diciembre y ya está en proceso de descomposición.
Desesperados, Teresita y Juan recurrieron al diario para contar la historia y reclamar que el PAMI cumpla con su deber. El año pasado tuvieron que iniciar una acción de amparo para que les entregaran el que tiene ahora, que tampoco es el adecuado.
Los llamados se sucedieron y todos preguntaban lo mismo: "¿cómo puedo ayudar? ¿Hay una cuenta para depositar dinero?" Una médica se ofreció a hacer las gestiones para conseguir el botón gástrico de la marca Bard, que es la que necesita Lorena. Otra lectora acercó un sobre con $2.000, que se le entregó personalmente a Juan, padre de Lorena (foto). En un mail, una lectora de otro país ofreció hacer un giro bancario.
Muchos llamaron, menos el PAMI. Con los médicos de esa obra social se comunicaron desde el Hospital de Niños y, según confirmó el director del hospital, Oscar Hilal, el botón llegaría entre lunes y martes.
"El doctor Hilal averiguó que el botón que necesita Lorena se consigue en Buenos Aires. Ahora es sólo una cuestión de decisión. Y hace falta que la decisión sea urgente, porque ya llevamos cuatro meses de atraso", dijo el padre de la joven.
Mientras su marido estaba en el hospital, su mujer quedó en su casa y los llamados fueron varios. "No lo puedo creer, nunca viví algo así. Estoy muy emocionada", dijo con la voz entrecortada por el llanto.
"No es dinero lo que buscamos cuando dimos a conocer el caso, sino que se cumpla la ley y el PAMI reconozca los derechos de Lorena. Es más, nos sentimos muy agradecidos, pero también un poco avergonzados", confesó Juan después de recibir el sobre con el dinero donado.