A corazón partido

El 10, la cabeza pensante del equipo, habla a corazón abierto. Instituto es el rival de turno, el club donde nació y donde luego pudo volar a conocer otras tierras. Gonzalo Bustamante no oculta su amor por la "gloria", tampoco la necesidad que tiene Atlético de sumar de a tres y borrar al menos por unos días el dolor de saber que por lo que se había luchado esta temporada no llegará. No sirvió el gasto o, quizás, como el cordobés mismo lo afirma, él y sus compañeros malgastaron a veces su poderío.

"Lo dije y lo ratifico, creo que nos faltó cinco para el peso. Contra Olimpo, por ejemplo, sin jugar bien, casi le empatamos el partido a uno de los candidatos. Pero bueno, esta temporada para nosotros estuvo signada por el 'casi'. Casi ganamos, casi empatamos", analiza a cara lavada un Bustamante intranquilo y molesto por no poder charlar a esta altura del campeonato sobre lo cerca que se está de llevar al equipo a Primera. Atlético y ellos, los jugadores, dejaron pasar el tren, y lo admiten.

Toda esa sinceridad brutal tiene una razón. Haber conformado un plantel para sumar 50 puntos no era el objetivo mayoritario de los refuerzos. "Se podría haber peleado más arriba. De hecho, los 50 puntos, no sé cómo decirlo, pero creo que nos van a quedar cortos porque deberíamos pasarlos tranquilamente y llegar a los 60", explica el enganche y califica la cosecha, siempre adelantándose a la actualidad del "decano", que hoy lo tiene con 44 puntos en el bolsillo. "Si llegamos a pasar la marca de esos 50, creo que la temporada sería de seis puntos. Se esperaba otra cosa, pero bueno, nosotros siempre apuntamos alto", aclara y vuelve a confesarse: "Más allá de que todos nos llevamos bien, nunca pudimos llegar a ser un gran equipo".

"Hay bronca, pero a su vez por ahí uno entiende que es difícil formar un gran equipo. Sin ir más lejos, Gimnasia (LP) y Central, que son los dos de los que están arriba, mantuvieron una base de varios años y se armaron muy bien. Sus jugadores mantuvieron un buen nivel, cosa que a nosotros nos costó. Fuimos muy irregulares. Todos -grafica-. Cuando uno estaba bien, el otro andaba mal, y viceversa. Quizás 12 fechas anduvimos bien, aunque tampoco ganamos. Empatamos bastante", explica .

Puede sonar a crítica cada palabra de Gonzalo, sin embargo, lo que dice lo dice con la angustia de saber que el dulce no es un premio "permitido" para el grupo. "La regularidad que se necesita como equipo y en las individualidades no estuvo. No faltó esfuerzo, puede que sí inteligencia para correr y jugar. Muchas veces te reprochan desde afuera que no se corre o no se juega, y vos adentro decís: 'la pucha, si me maté hoy'. Y cuando te ponés a analizar y ver el partido de nuevo les das la razón a la gente. Hay veces que no sos inteligente o no haces las cosas bien y te va como nos fue este año a nosotros este año. Y nos duele a nosotros como a nadie".

Y mientras derrocha sinsabores actuales Bustamante mira lo que viene. "Pienso que el año que viene Atlético tiene que pelear sí o sí el ascenso". Entonces, la pregunta vuela a sus botines. ¿Bustamante quiere revancha? "El club no habló nada conmigo, pero si nos sentamos a hablar y se llega a un acuerdo, sí por supuesto que me seguiría en el club. Estoy muy cómodo en Tucumán; viviendo acá me siento muy bien, la gente me trató muy bien. El club también, pese a todos los problemas que hubo y hay respecto a lo económico". El OK del estratega está, aunque existe una cláusula. "Dependerá del técnico que venga (o de Rodríguez, si sigue). Acá hay un entrenador que quieren mucho, pero con el que yo no me llevo muy bien", sentencia.