El mundo político destacó el hecho de que murió en una celda

La dirigencia del país, que repudió al ex presidente de facto, indicó que sólo será recordado como un dictador y como un represor

18 Mayo 2013
BUENOS AIRES.- El Gobierno nacional se pronunció en forma cauta sobre la muerte del dictador Jorge Rafael Videla y, luego de advertir que "jamás festejamos una muerte", resaltó el hecho de que haya fallecido en la cárcel y condenado por la Justicia en democracia. También hubo repercusiones de parte del Gobierno bonaerense y del porteño, a través de sus respectivos mandatarios.

En tanto la presidenta, Cristina Fernández, viajó a Santa Cruz para descansar el fin de semana y mantiene silencio sobre el tema, pero varios de sus ministros opinaron sobre la muerte de Videla.

El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, escribió en su Twitter que "Videla murió juzgado, condenado, preso en una cárcel común y repudiado por todo el pueblo argentino". "Jamás festejamos una muerte", remarcó, "pero nos alegra que la muerte lo haya encontrado juzgado, preso, y condenado como corresponde".

Desde Mendoza, el ministro de Interior, Florencio Randazzo, resaltó que el dictador terminó sus últimos años en cárcel común, "producto de que ha existido una Justicia que lo ha juzgado y ha pagado con la cárcel todas las atrocidades cometidas". "Ninguna muerte nos puede poner contentos, pero realmente Videla significó una etapa trágica de la historia argentina".

A su turno, el titular de Trabajo, Carlos Tomada, estimó que "a un genocida como él, lo que más le dolió en vida son estos tiempos de Patria Grande que estamos viviendo. Videla murió en el lugar que tenía que morir", agregó.

El arco opositor al kirchnerismo evitó sus diferencias y se pronunció en sintonía en contra de la figura de Videla. Así, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, sostuvo que el ex dictador recuerda "lo que nunca más queremos en la Argentina". Por su lado, el gobernador de Córdoba, el peronista José Manuel de la Sota, afirmó que "ha muerto un asesino". "Murió de viejo. A quienes mandó matar no tuvieron esa chance. Eran jóvenes", acotó el mandatario provincial.

Terror y muerte

El referente del Frente Amplio Progresista (FAP) Hermes Binner también opinó: "Murió Videla: lloramos las 30.000 víctimas de su dictadura". Ricardo Gil Lavedra, diputado radical y ex integrante del tribunal que condenó a la Junta Militar, opinó que "Videla será recordado como un dictador que sembró la muerte en la Argentina y produjo la dictadura más sangrienta y terrible. Nunca ha mostrado arrepentimiento sobre los hechos, ni tampoco una reparación a las víctimas".

Desde el sindicalismo, el diputado del Frente para la Victoria, Facundo Moyano., consideró que "el hecho de que Videla haya muerto luego de ser juzgado y cumpliendo una condena a perpetua en cárcel común, es una buena noticia". Gerónimo "Momo" Venegas, jefe del gremio de peones rurales y líder del partido FE, que agrupa a peronistas disidentes, indicó que "murió el responsable de la desaparición de una gran cantidad de delegados de fábrica durante la última dictadura" y advirtió: "todos los que teníamos actividad sindical fuimos los principales perseguidos durante el Proceso".

También representantes de organizaciones defensoras de Derechos Humanos coincidieron en destacar que el ex dictador falleció "condenado" varias veces a prisión perpetua, mientras que el secretario de Derechos Humanos, Martín Fresneda, advirtió que "nunca hay que celebrar la muerte de nadie, pero sí consagrar que hubo justicia". "Es un día para reflexionar que otros tiempos se van acabando", dijo.

A su turno, el Premio Nobel de la Paz y titular de Serpaj, Adolfo Pérez Esquivel, resaltó que "Videla se pasó la vida haciendo mucho daño al pueblo argentino y a la humanidad. Hay que tomar las cosas con mucha serenidad y seguir trabajando por una sociedad mejor, más justa y humana para todos, y que todo ese horror no ocurra nunca más". Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, indicó que "Videla murió condenado pero hay que buscar información de su entorno para proseguir con las causas sobre bebés apropiados en la dictadura. Todavía falta condenar a muchos genocidas, y en eso estamos". (DyN-Télam)

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