28 Mayo 2013
CON LOS NIÑOS. El Papa saluda a un grupo de chicos que asistieron a su misa, en Santa Elizabetta, de Roma. REUTERS
CIUDAD DEL VATICANO.- El papa Francisco criticó "la cultura de la comodidad" refiriéndose a las parejas de católicos que sólo quieren tener un hijo para poder seguir yéndose de vacaciones o comprarse una casa.
"Cuántas parejas se casan y piensan en el fondo de su corazón, sin atreverse a decirlo: mientras dure el amor, después ya veremos", observó Francisco durante una misa matinal.
El Papa se refirió a lo que podría ser la manera de pensar de un padre católico del presente: "No, no quiero más de un niño, porque entonces no podremos irnos de vacaciones, no podremos ir a tal lugar, no podremos comprarnos una casa (...) Queremos seguir al Señor, pero hasta cierto punto".
"El bienestar nos anestesia, nos hace hundir, nos despoja del coraje de ir hacia Jesús. Es la primera riqueza de nuestra cultura actual, la cultura del bienestar", deploró. El Papa, que concelebraba la misa con el cardenal Philippe Barbarin, arzobispo de Lyon (Francia) en la capilla de la Casa Santa Marta, donde reside, habló de una "fascinación por lo provisorio".
Como ejemplo a seguir, el Papa ha propuesto a "tantos hombres y mujeres que han dejado la propia tierra para ir como misioneros por toda la vida" y a "tantos hombres y mujeres que han dejado la propia casa para formar un matrimonio para toda la vida". (DYN)
"Cuántas parejas se casan y piensan en el fondo de su corazón, sin atreverse a decirlo: mientras dure el amor, después ya veremos", observó Francisco durante una misa matinal.
El Papa se refirió a lo que podría ser la manera de pensar de un padre católico del presente: "No, no quiero más de un niño, porque entonces no podremos irnos de vacaciones, no podremos ir a tal lugar, no podremos comprarnos una casa (...) Queremos seguir al Señor, pero hasta cierto punto".
"El bienestar nos anestesia, nos hace hundir, nos despoja del coraje de ir hacia Jesús. Es la primera riqueza de nuestra cultura actual, la cultura del bienestar", deploró. El Papa, que concelebraba la misa con el cardenal Philippe Barbarin, arzobispo de Lyon (Francia) en la capilla de la Casa Santa Marta, donde reside, habló de una "fascinación por lo provisorio".
Como ejemplo a seguir, el Papa ha propuesto a "tantos hombres y mujeres que han dejado la propia tierra para ir como misioneros por toda la vida" y a "tantos hombres y mujeres que han dejado la propia casa para formar un matrimonio para toda la vida". (DYN)