06 Septiembre 2013
ESTUDIO DE INVERSION-RENTA. Según Robles Terán, se tendrán en cuenta el cultivo antecesor a la soja, como maíz o sorgo, porque mejoran las condiciones del suelo y por ende los rendimientos. LA GACETA / FOTO DE TERESA PASQUERO
Los productores granarios de Tucumán y de la región ya saben que es lo que pasa cuando se siembra aceleradamente y no se toman ciertas precauciones antes de decidir lanzar las sembradoras al campo.
"Personalmente no creo que los productores se larguen a sembrar soja, maíz, sorgo o poroto, o cualquier otro cultivo, después de una lluvia importante. Seguramente esperaran a tener un perfil suficiente de suelo húmedo que le asegure no solo el nacimiento de una nueva planta sino que también les de tiempo como para que ocurran más lluvias que permitan el desarrollo normal de un cultivo", aseguró a LA GACETA Rural el presidente de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT), Sebastián Robles Terán.
"Sin duda en la campaña que se viene el productor tendrá una actitud más de prudencia antes de decidir sembrar, con la seguridad de que los perfiles de humedad de suelo sean adecuados", apuntó.
Según el directivo, el productor seguramente analizará con más detenimiento los beneficios que se vieron en años secos como los pasados, cuál es el cultivo antecesor, llámese maíz o sorgo, ya que la oleaginosa se comportó mejor ante la falta adecuada de lluvias.
Considera que la rotación este año se incrementará, ya que el productor buscará obtener a futuro mejores condiciones del suelo para el cultivo de granos.
"Esperemos que el alto costo que tiene la producción de maíz no condicione la decisión de rotación que tanto beneficios trae al productor, pero esto es algo que el productor y su técnico deben evaluar y decidir", subrayó.
Según Robles Terán, actualmente hay un susto generalizado del productor por lo que viene pasando, y por eso realiza un análisis profundo de costos de producción. "Por eso la toma de decisiones seguramente será más pensada, sobre todo si su producción es sobre campo arrendado", añadió.
Respecto de este tema, el ruralista indicó que los productores poco o nada "cierran arriendos" en pagos fijos, salvo excepciones que dan cierta seguridad. La mayoría -apuntó- están conversando con los propietarios para pagar en porcentajes a cosecha.
"Hoy con los valores que se venían arrendando los campos no existe ninguna rentabilidad para el productor, y si llega a tocar un año malo la situación es mas complicada", sentenció.
Además, existe un problema grave que afrontan todos los productores y es la financiación y cómo enfrentar los gastos de producción desde el inicio. "Por suerte existe muy buena voluntad por parte de los proveedores para que el productor pueda llevar adelante una nueva campaña, a pesar que muchos están endeudados".
Lo real es que a nivel país la intención de siembra tendrá un mayor aumento, pero en el NOA debe esperarse un poco para que el productor se defina.
"Los productores de escala grande en general ya tienen planificado que es lo que harán en la campaña que se viene. Pero el mediano y el chico debe esperar, analizar, conversar y entonces decidir que es lo que hará. El productor ya viene con financiación desde la campaña pasada con diversos mecanismos y al haber sido una mala campaña nuevamente tendrá que utilizar las herramientas de financiación que actualmente existen, como los bancos o las empresas proveedoras y comercializadoras de granos", indicó Robles Terán. "El capital de trabajo hoy es bajo y se debe financiar el trabajo futuro", concluyó.
"Personalmente no creo que los productores se larguen a sembrar soja, maíz, sorgo o poroto, o cualquier otro cultivo, después de una lluvia importante. Seguramente esperaran a tener un perfil suficiente de suelo húmedo que le asegure no solo el nacimiento de una nueva planta sino que también les de tiempo como para que ocurran más lluvias que permitan el desarrollo normal de un cultivo", aseguró a LA GACETA Rural el presidente de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT), Sebastián Robles Terán.
"Sin duda en la campaña que se viene el productor tendrá una actitud más de prudencia antes de decidir sembrar, con la seguridad de que los perfiles de humedad de suelo sean adecuados", apuntó.
Según el directivo, el productor seguramente analizará con más detenimiento los beneficios que se vieron en años secos como los pasados, cuál es el cultivo antecesor, llámese maíz o sorgo, ya que la oleaginosa se comportó mejor ante la falta adecuada de lluvias.
Considera que la rotación este año se incrementará, ya que el productor buscará obtener a futuro mejores condiciones del suelo para el cultivo de granos.
"Esperemos que el alto costo que tiene la producción de maíz no condicione la decisión de rotación que tanto beneficios trae al productor, pero esto es algo que el productor y su técnico deben evaluar y decidir", subrayó.
Según Robles Terán, actualmente hay un susto generalizado del productor por lo que viene pasando, y por eso realiza un análisis profundo de costos de producción. "Por eso la toma de decisiones seguramente será más pensada, sobre todo si su producción es sobre campo arrendado", añadió.
Respecto de este tema, el ruralista indicó que los productores poco o nada "cierran arriendos" en pagos fijos, salvo excepciones que dan cierta seguridad. La mayoría -apuntó- están conversando con los propietarios para pagar en porcentajes a cosecha.
"Hoy con los valores que se venían arrendando los campos no existe ninguna rentabilidad para el productor, y si llega a tocar un año malo la situación es mas complicada", sentenció.
Además, existe un problema grave que afrontan todos los productores y es la financiación y cómo enfrentar los gastos de producción desde el inicio. "Por suerte existe muy buena voluntad por parte de los proveedores para que el productor pueda llevar adelante una nueva campaña, a pesar que muchos están endeudados".
Lo real es que a nivel país la intención de siembra tendrá un mayor aumento, pero en el NOA debe esperarse un poco para que el productor se defina.
"Los productores de escala grande en general ya tienen planificado que es lo que harán en la campaña que se viene. Pero el mediano y el chico debe esperar, analizar, conversar y entonces decidir que es lo que hará. El productor ya viene con financiación desde la campaña pasada con diversos mecanismos y al haber sido una mala campaña nuevamente tendrá que utilizar las herramientas de financiación que actualmente existen, como los bancos o las empresas proveedoras y comercializadoras de granos", indicó Robles Terán. "El capital de trabajo hoy es bajo y se debe financiar el trabajo futuro", concluyó.