16 Junio 2014
ALEGRÍA CONCEPCIONENSE. Pablo González y Pablo Morán en el podio, exhibiendo los tradicionales ponchos que se entregan a los ganadores en tierra catamarqueña.
CATAMARCA.- Siempre hay una primera vez y ayer lo fue para Pablo Morán. El piloto de Concepción debutó como triunfador en una prueba nacional, al adjudicarse la Clase 9 del Rally de Catamarca, fecha 3 de la temporada 2014. La buena cosecha tucumana se completó con lo logrado por el monterizo Samir Assaf, 2° en C-3. La clasificación general de la prueba tuvo al cordobés Marcos Ligato (Chevrolet Agile Maxi Rally) en lo más alto.
Morán, con un Ford Ka de propia elaboración y navegado por su amigo Pablo González, mantuvo la punta que había logrado el sábado. Terminó por sacarle 4’23”2/10 a su escolta, el santafesino Raúl Racca (Ford). En la clase menor de la prueba también logró arribar Ricardo Collado (Ford), en el 5° lugar, a 10’40”6/10.
“En verdad que fue una carrera en la que anduve bien prácticamente todo el tiempo. El único susto fue cuando, casi al final de la primera pasada de ayer, empecé a escuchar un ruido en el palier izquierdo en el tramo de enlace. Y cuando estaba entrando en la asistencia, se cortó. Tuvimos que empujar el auto para llegar a la carpa. Por suerte ocurrió allí y no en el camino, sino no la contaba”, dijo el piloto de 25 años.
Morán salió a pelear su posición con César Montecino (Renault Clio) muy cerca. Pero el rionegrino chocó en el segundo prime del día y así le dejó el camino libre para administrar la diferencia. “En los tramos finales traté de divertirme, de correr lo más calmado posible. Sentía que esta vez no se me podía escapar la victoria” apuntó Pablo. Esta fue una directa referencia a la mala suerte que tuvo toda vez que estuvo cerca de ganar. Incluso, a una incursión que hizo por Bariloche hace algunos años: allí también logró el triunfo, pero debido a que no tenía el auto homologado, el éxito no quedó ligitimado.
Del triunfo del sacrificio a la ratificación de las dotes conductivas. Ese es el caso de Assaf, que terminó finalmente como escolta del cordobés Álvaro Marchetto, a 40”4/10. El juvenil monterizo superó algunos problemas en el Mitsubishi del equipo Schroeder navegado por Diego Ruiz Elías y sumó buenos puntos para el torneo: está 3°, a 21 puntos del líder, el cordobés Elder Tasca. (Especial)
Morán, con un Ford Ka de propia elaboración y navegado por su amigo Pablo González, mantuvo la punta que había logrado el sábado. Terminó por sacarle 4’23”2/10 a su escolta, el santafesino Raúl Racca (Ford). En la clase menor de la prueba también logró arribar Ricardo Collado (Ford), en el 5° lugar, a 10’40”6/10.
“En verdad que fue una carrera en la que anduve bien prácticamente todo el tiempo. El único susto fue cuando, casi al final de la primera pasada de ayer, empecé a escuchar un ruido en el palier izquierdo en el tramo de enlace. Y cuando estaba entrando en la asistencia, se cortó. Tuvimos que empujar el auto para llegar a la carpa. Por suerte ocurrió allí y no en el camino, sino no la contaba”, dijo el piloto de 25 años.
Morán salió a pelear su posición con César Montecino (Renault Clio) muy cerca. Pero el rionegrino chocó en el segundo prime del día y así le dejó el camino libre para administrar la diferencia. “En los tramos finales traté de divertirme, de correr lo más calmado posible. Sentía que esta vez no se me podía escapar la victoria” apuntó Pablo. Esta fue una directa referencia a la mala suerte que tuvo toda vez que estuvo cerca de ganar. Incluso, a una incursión que hizo por Bariloche hace algunos años: allí también logró el triunfo, pero debido a que no tenía el auto homologado, el éxito no quedó ligitimado.
Del triunfo del sacrificio a la ratificación de las dotes conductivas. Ese es el caso de Assaf, que terminó finalmente como escolta del cordobés Álvaro Marchetto, a 40”4/10. El juvenil monterizo superó algunos problemas en el Mitsubishi del equipo Schroeder navegado por Diego Ruiz Elías y sumó buenos puntos para el torneo: está 3°, a 21 puntos del líder, el cordobés Elder Tasca. (Especial)