11 Septiembre 2014
VOTO A FAVOR. La bancada oficialista en Diputados daba vía libre a la ley. télam
BUENOS AIRES.- La Cámara de Diputados se encaminaba esta madrugada a convertir en ley el proyecto de Pago Soberano de la deuda, enviado por el Poder Ejecutivo para cambiar el lugar de pago de la deuda reestructurada y revocar el mandato del Bank of New York Mellon (BONY) como agente fiduciario. Así, se ofrecerá una alternativa a los acreedores ante las trabas a los cobros impuestos por los fallos del juez Thomas Griesa.
El debate de la propuesta oficial se había iniciado a las 14 y tuvo momentos de tensión cuando desde la tribuna insultaron y abuchearon a legisladores de la oposición, e incluso hubo un fuerte cruce entre Facundo Moyano (Cultura, Educación y Trabajo) y el ultrakirchnerista Carlos Kunkel. Más allá de esos sobresaltos, el kirchnerismo no tendría dificultad en convertir en ley la norma que ya tiene media sanción del Senado. El radicalismo anticipó que votará en contra de la propuesta oficial, al igual que los bloques del Frente Renovador y de Unión PRO.
“En ejercicio del poder soberano” del país, el primer artículo del proyecto declara de interés público la reestructuración de la deuda soberana realizada en 2005 y 2010, así como “el pago en condiciones justas, equitativas, legales y sustentables al 100% de los tenedores de títulos públicos”; esto es, tanto a los bonistas que entraron a los respectivos canjes como a los holdouts que litigan contra Argentina.
El objetivo de la norma es “implementar instrumentos legales” que permitan el cobro de la deuda a todos los bonistas, ante la “ilegítima e ilegal obstrucción de los mecanismos de cobro de los fondos” depositados por el Estado argentino en el Banco de Nueva York el 26 de junio pasado, medida dispuesta por el juez Griesa. Según el Poder Ejecutivo, este bloqueo es “violatorio tanto de la soberanía e inmunidades” de Argentina “como de los derechos de terceros”, en alusión a los bonistas que se ven impedidos de cobrar esos fondos.
Por eso, el proyecto autoriza al ministro de Economía a remover al Banco de Nueva York como agente fiduciario y a reemplazarlo por Nación Fideicomisos S.A., creada para tal fin en el Banco Central de Argentina. No obstante, la propuesta reconoce el derecho de los tenedores de bonos de designar otro agente de otro país que garantice el canal de cobros, incluso Estados Unidos.
La iniciativa autoriza al Ministerio de Economía a “instrumentar el canje” de los títulos públicos que aún no ingresaron a las reestructuraciones de 2005 y 2010, entre los que se encuentran los fondos buitre. Según el Ejecutivo, la cuenta especial en Nación Fideicomisos se abre “en virtud de la buena fe de Argentina, y de su voluntad y capacidad de pago en condiciones equitativas para todos sus acreedores, según la interpretación convencional y generalmente conocida como pari passu”.
No de Griesa a holdouts
En otro orden, el juez Griesa desestimó ayer un pedido de los holdouts para que obligue al Citigroup a que informe sobre activos embargables de la Argentina. El magistrado señaló que no se pronunciará sobre esa solicitud hasta tanto la Cámara de Apelaciones del Segundo Circuito se expida sobre un reclamo de la entidad bancaria, que cuestionó la orden que dio Griesa de impedir el pago de bonos con legislación argentina. “Es evidente que cualquier decisión de la Corte de Apelaciones influirá sobre este tema”, dijo Griesa.
La audiencia de ayer fue a solicitud de NML Capital, que pretendía que Griesa ratificara la orden de impedir al Citigroup el bloqueo de títulos con legislación argentina. NML le solicitó al juez que le pida al Citigroup “evidencias” de que las autoridades argentinas “lo estaban presionando para que incumpla su sentencia, bajo amenaza de cierre de su sucursal”. (DyN-DPA)
El debate de la propuesta oficial se había iniciado a las 14 y tuvo momentos de tensión cuando desde la tribuna insultaron y abuchearon a legisladores de la oposición, e incluso hubo un fuerte cruce entre Facundo Moyano (Cultura, Educación y Trabajo) y el ultrakirchnerista Carlos Kunkel. Más allá de esos sobresaltos, el kirchnerismo no tendría dificultad en convertir en ley la norma que ya tiene media sanción del Senado. El radicalismo anticipó que votará en contra de la propuesta oficial, al igual que los bloques del Frente Renovador y de Unión PRO.
“En ejercicio del poder soberano” del país, el primer artículo del proyecto declara de interés público la reestructuración de la deuda soberana realizada en 2005 y 2010, así como “el pago en condiciones justas, equitativas, legales y sustentables al 100% de los tenedores de títulos públicos”; esto es, tanto a los bonistas que entraron a los respectivos canjes como a los holdouts que litigan contra Argentina.
El objetivo de la norma es “implementar instrumentos legales” que permitan el cobro de la deuda a todos los bonistas, ante la “ilegítima e ilegal obstrucción de los mecanismos de cobro de los fondos” depositados por el Estado argentino en el Banco de Nueva York el 26 de junio pasado, medida dispuesta por el juez Griesa. Según el Poder Ejecutivo, este bloqueo es “violatorio tanto de la soberanía e inmunidades” de Argentina “como de los derechos de terceros”, en alusión a los bonistas que se ven impedidos de cobrar esos fondos.
Por eso, el proyecto autoriza al ministro de Economía a remover al Banco de Nueva York como agente fiduciario y a reemplazarlo por Nación Fideicomisos S.A., creada para tal fin en el Banco Central de Argentina. No obstante, la propuesta reconoce el derecho de los tenedores de bonos de designar otro agente de otro país que garantice el canal de cobros, incluso Estados Unidos.
La iniciativa autoriza al Ministerio de Economía a “instrumentar el canje” de los títulos públicos que aún no ingresaron a las reestructuraciones de 2005 y 2010, entre los que se encuentran los fondos buitre. Según el Ejecutivo, la cuenta especial en Nación Fideicomisos se abre “en virtud de la buena fe de Argentina, y de su voluntad y capacidad de pago en condiciones equitativas para todos sus acreedores, según la interpretación convencional y generalmente conocida como pari passu”.
No de Griesa a holdouts
En otro orden, el juez Griesa desestimó ayer un pedido de los holdouts para que obligue al Citigroup a que informe sobre activos embargables de la Argentina. El magistrado señaló que no se pronunciará sobre esa solicitud hasta tanto la Cámara de Apelaciones del Segundo Circuito se expida sobre un reclamo de la entidad bancaria, que cuestionó la orden que dio Griesa de impedir el pago de bonos con legislación argentina. “Es evidente que cualquier decisión de la Corte de Apelaciones influirá sobre este tema”, dijo Griesa.
La audiencia de ayer fue a solicitud de NML Capital, que pretendía que Griesa ratificara la orden de impedir al Citigroup el bloqueo de títulos con legislación argentina. NML le solicitó al juez que le pida al Citigroup “evidencias” de que las autoridades argentinas “lo estaban presionando para que incumpla su sentencia, bajo amenaza de cierre de su sucursal”. (DyN-DPA)