La prioridad será del transporte público y de los peatones

Implementar un sistema de movilidad urbana que priorice el transporte público y al peatón; avanzar con medidas que acerquen a San Miguel de Tucumán al modelo de “ciudades inteligentes”; generar una mayor conciencia colectiva sobre cómo debe comportarse el vecino en la ciudad. Estos son algunos de los temas que las autoridades de la Municipalidad capitalina planean desarrollar en el mediano plazo.

El subsecretario de Planificación Urbana, Luis Lobo Chaklián, destacó que es fundamental ordenar el tránsito. “El área central es un atractor muy fuerte. Para eso hay que generar medidas que le dan calidad de vida al peatón y que desalienten el uso incorrecto de los vehículos”, detalló.

Puntualmente, el funcionario se refirió al sistema de movilidad que comenzará a aplicarse el año que viene. “Se trata de una reforma del sistema actual. En los horarios pico tenemos 173 ómnibus en la Crisóstomo Álvarez y 167 en la Santiago; si a eso se le suman los taxis y los vehículos particulares nos encontramos con los conflictos que tenemos hoy”, enumeró.

Lobo Chaklián dijo que una de las metas es reducir al menos un 20% el tiempo que duran los viajes ¿Pero cómo? “En los sectores más conflictivos hay que darle prioridad al transporte público; habrá calles exclusivas en las que la calzada será para los ómnibus y se evitarán los problemas que causan los vehículos particulares. Dentro de esta propuesta está previsto diferenciar los corredores de los ómnibus urbanos e interurbanos. Y simplificar los recorridos. Esto arrancará en 2015”, adelantó.

Fibra óptica

Acercar a la capital al modelo de “ciudad inteligente” es otro objetivo de la administración de Domingo Amaya. “Desarrollamos un plan para empezar a utilizar la infraestructura básica de fibra óptica para comunicar toda la ciudad. Ya existe una estructura y se está por llamar a licitación para instalar más. En el futuro, esto nos permitirá tener una ciudad sin cableado aéreo, porque mediante esta red se podrá transmitir desde televisión y telefonía hasta conectar los cajeros automáticos”, adelantó Lobo.

Con respecto a la relación entre el vecino y la ciudad, consideró que es necesario trabajar para generar conciencia ciudadana. “Se recuperaron espacios verdes, se mejoró la accesibilidad, pero empiezan a aparecer otras demandas. Un déficit importante es la falta de conciencia colectiva sobre cómo hay que comportarse en la ciudad. Esto causa las incoductas en el tránsito, la generación de basurales, el vandalismo... Hace falta decisión política para desarrollar una conciencia urbana”, concluyó el funcionario.