Por Miguel Eduardo Décima
05 Octubre 2014
LUCHA. Lucas Bossio, que volvió a ser uno de los mejores de San Martín, disputa la pelota con el inquietante Alejandro Toledo.
La tabla de posiciones no miente. Eso quedó demostrado luego de observar los 90 minutos entre San Martín y San Jorge. Ambos libraron un duelo de necesitados y se repartieron un punto con mucho sabor a nada.
El 1-1 final tuvo un valor diferente para los protagonistas. Por el lado del local, sus jugadores fueron duramente reprobados por los hinchas que observa como el equipo no reacciona y que, con poco, los adversarios le terminan complicando el trámite. Mientras que el “expreso” se fue saboreando un punto importante si se tiene en cuenta que es el primero que recoge en calidad de visitante. Un presente triste por la historia del fútbol tucumano, pero la realidad es una: ambos conjuntos están cerrando el lote de la zona 3 del Federal A.
En los primeros 20 minutos del encuentro se pudo observar a un San Martín ambicioso, con una saludable actitud para manejar la pelota en velocidad. Esto le permitió llegar rápidamente a desequilibrar el marcador a través de Maximiliano Velasco. Pero eso fue sólo un espejismo, porque en el horizonte de La Ciudadela volvieron a aparecer las lagunas futbolísticas que fueron una constante en este tramo del torneo.
El panorama se complicó cuando Velasco se fue expulsado por una falta a Diego Migueles. Y aún más, cuando Walter Bravo aprovechó un descuido de la zaga local, para establecer el 1-1.
En el segundo tiempo se acentuó la apatía futbolística de San Martín ante un rival que manejó la pelota inteligentemente, más aún cuando esta pasaba por los pies de Diego Romero, la figura de la cancha. Ni Albano Becica ni Matías Galvaliz estuvieron en una noche feliz y todo se circunscribía a la capacidad de corte de Lucas Bossio y las proyecciones de “Maxi” Martínez, dos argumentos escasos para aspirar a un victoria.
Si San Martín todavía alimentaba alguna chance de ascenso directo, ayer se despidió definitivamente. “JJ” López deberá trabajar a destajo para revertir esta situación.
El 1-1 final tuvo un valor diferente para los protagonistas. Por el lado del local, sus jugadores fueron duramente reprobados por los hinchas que observa como el equipo no reacciona y que, con poco, los adversarios le terminan complicando el trámite. Mientras que el “expreso” se fue saboreando un punto importante si se tiene en cuenta que es el primero que recoge en calidad de visitante. Un presente triste por la historia del fútbol tucumano, pero la realidad es una: ambos conjuntos están cerrando el lote de la zona 3 del Federal A.
En los primeros 20 minutos del encuentro se pudo observar a un San Martín ambicioso, con una saludable actitud para manejar la pelota en velocidad. Esto le permitió llegar rápidamente a desequilibrar el marcador a través de Maximiliano Velasco. Pero eso fue sólo un espejismo, porque en el horizonte de La Ciudadela volvieron a aparecer las lagunas futbolísticas que fueron una constante en este tramo del torneo.
El panorama se complicó cuando Velasco se fue expulsado por una falta a Diego Migueles. Y aún más, cuando Walter Bravo aprovechó un descuido de la zaga local, para establecer el 1-1.
En el segundo tiempo se acentuó la apatía futbolística de San Martín ante un rival que manejó la pelota inteligentemente, más aún cuando esta pasaba por los pies de Diego Romero, la figura de la cancha. Ni Albano Becica ni Matías Galvaliz estuvieron en una noche feliz y todo se circunscribía a la capacidad de corte de Lucas Bossio y las proyecciones de “Maxi” Martínez, dos argumentos escasos para aspirar a un victoria.
Si San Martín todavía alimentaba alguna chance de ascenso directo, ayer se despidió definitivamente. “JJ” López deberá trabajar a destajo para revertir esta situación.