Una chispa desató un infierno de llamas y humo

El incendio comenzó a las 10. Los bomberos lucharon con el fuego durante todo el día. Riesgo de derrumbe de una habitación

A LA CALLE. Los bomberos sacaron parte de la mercadería a la calle para evitar que siga alimentando a las llamas. la gaceta / foto de florencia zurita A LA CALLE. Los bomberos sacaron parte de la mercadería a la calle para evitar que siga alimentando a las llamas. la gaceta / foto de florencia zurita
14 Octubre 2015
Largas horas de trabajo y 10 dotaciones de bomberos se necesitaron para luchar contra el fuego. Las llamas provenían del depósito de una librería céntrica y no tardaron en extenderse en las tres plantas del local.

El incendio comenzó alrededor de las 10 de ayer, en la librería “León”, ubicada en calle Junín al 300. Ese comercio está distribuido en tres pisos: el salón de ventas funciona en la planta baja, mientras que el primero y el segundo piso son utilizados como depósito de mercaderías.

Dos empleados que trabajaban en el segundo piso advirtieron que había ocurrido un cortocircuito y no tardaron en ver las llamas. “Ese lugar estaba lleno de pelotitas de telgopor, goma eva y muchos papeles. Eso empezó a arder enseguida”, relataron los empleados, que pidieron preservar sus nombres.



Los jóvenes dijeron que de inmediato tomaron un matafuegos e intentaron apagar las llamas. “En un momento pensamos que ya lo habíamos apagado, pero había mucho humo y no se veía nada”, contaron. Entonces los empleados fueron al otro piso para chequear que allí esté todo en orden. Segundos después volvieron a bajar al segundo y se encontraron con enormes llamas.


Empleados y clientes evacuaron el local y llamaron a los bomberos. Policías de la Guardia Urbana debieron cortar el tránsito en las esquinas próximas a la librería para que pudieran pasar las dotaciones de bomberos voluntarios, que habían llegado de todas partes: capital, Tafí Viejo, Yerba Buena, La Florida y Termas de Río Hondo, además de los bomberos de la Policía.

También estacionaron en los alrededores ambulancias del 107, a modo de prevención. Además, se sumaron representantes de Defensa Civil y de la Cruz Roja, todos dispuestos a colaborar. El personal que trabajaba en el lugar aseguró que no hubo personas con asfixia y que no fue necesario brindar asistencia médica.



El fuego, mientras tanto, continuaba ardiendo. Podían verse llamas asomarse desde los dos pisos de arriba, además de una pesada columna de humo. Detrás de las cintas perimetrales, cientos de curiosos se agolpaban para ver el accionar de los bomberos y registrar alguna imagen con sus teléfonos celulares.

Anoche, las dotaciones de bomberos se rotaban para continuar con las tareas de prevención que, según informó Defensa Civil Municipal, iban a realizarse durante toda la madrugada.

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