26 Agosto 2016
DOS TURNOS. Comenzaron al mediodía y, tras un parate, regresaron a las 18. la gaceta / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Los concejales de Yerba Buena aprobaron ayer el presupuesto 2016 del municipio. El instrumento de gestión del intendente Mariano Campero (Acuerdo para el Bicentenario) había sido presentado al cuerpo a finales de mayo, pero su tratamiento había sido postergado. Al punto que los ediles debatieron más de dos meses para modificar los montos de algunas partidas. La particularidad de la sesión extraordinaria fue que insumió poco más de dos horas de debate y tuvo cuatro horas de cuarto intermedio: comenzó a las 12 y se reanudó a las 18, luego de un parate consensuado entre los concejales yerbabuenenses.
La ordenanza de Presupuesto prevé gastos por $ 480 millones, lo que significa un incremento del 55% respecto al último año de gestión del anterior intendente Daniel Toledo (FpV). Casi $280 millones serán usados para los salarios de los empleados municipales. De ese total, a su vez, $219 millones corresponden a los sueldos del personal permanente, y unos $38 millones para contratados. El nuevo instrumento eleva la planta de personal 100 agentes, hasta alcanzar 1.266 empleados. Ese aumento había despertado dudas al edil macrista Pedro Albornoz Piossek. El oficialismo insistió en que el incremento responde a que se regularizó la situación de alrededor de 80 empleados municipales.
A sus casas
Apenas inició la sesión, los concejales oficialistas solicitaron un cuarto intermedio de cuatro horas, hasta las 18, para que los docentes de la escuela municipal Petrona Campero de Adami puedan estar presentes al momento de sancionar el estatuto docente para los maestros municipales.
Lucas Cerúsico (UCR) y Albornoz Piossek votaron en contra del parate y arguyeron que se trataba de una maniobra para evitar la presencia de la prensa, versión desestimada por el resto de los ediles.
Turno tarde
Apenas comenzó la sesión, y con la presencia de una veintena de representantes de la escuela municipal, los concejales aprobaron el estatuto para los docentes municipales. De esta manera, los educadores de ese municipio dejarán de estar bajo el convenio de trabajo de empleados municipales.
Finalizados los aplausos, Albornoz Piossek arremetió de inmediato contra el intendente Campero, reclamando transparencia al proyecto de presupuesto. “Hay cosas que no me dejan tranquilo. En la partida Comunicaciones se asignan alrededor de $ 3 millones, que la maneja el secretario de Comunicación y Gobierno Abierto, Pablo Macchiarola. Me genera desconfianza dejarle administrar montos de todos los vecinos, cuando él reconoció públicamente que tiene una financiera a 20 metros de la municipalidad. No me puedo quedar tranquilo de entregar presupuesto a un usurero. También quiero que me respondan los pedidos de informes para tener la nómina de empleados que serán nombrados”, criticó el macrista.
La polémica con el funcionario de Campero había comenzado hace más de un mes, cuando el edil opositor cuestionó la cifra de nombramientos prevista en el proyecto de presupuesto. Macchiarola le había respondido denunciando que las esposas de Albornoz Piossek y de Cerúsico habían sido nombradas como asesoras de bloque.
Walter “Kabuby” Aráoz, presidente de la comisión de Hacienda, defendió el proyecto de presupuesto y las modificaciones realizadas en el Concejo. Celebró que el nuevo piso establecido para los empleados municipales sea el haber de categoría 18. Destacó también el aumento respecto al proyecto original a los fondos para obras públicas (se prevén $77 millones) y la inclusión de $60 millones de la Secretaría de Vivienda de la Nación remitidos para obras de mejoramiento urbano dentro del Programa de Mejoramiento Barrial (Promeba).
“Respecto a las críticas por los nombramientos, de los 100 cargos 83 son incorporaciones a planta permanente. Allí estamos regularizando las condiciones de muchos trabajadores”, defendió Aráoz. José Macome (Cambiemos Yerba Buena) pidió seriedad a sus pares y que se acuda a la Justicia en lugar de realizar acusaciones públicas en el recinto.
Finalmente el presupuesto fue sancionado por siete votos, con el voto negativo de Cerúsico y Albornoz Piossek. El nuevo instrumento, en tanto, prevé $98 millones para endeudamiento con la Provincia.
La ordenanza de Presupuesto prevé gastos por $ 480 millones, lo que significa un incremento del 55% respecto al último año de gestión del anterior intendente Daniel Toledo (FpV). Casi $280 millones serán usados para los salarios de los empleados municipales. De ese total, a su vez, $219 millones corresponden a los sueldos del personal permanente, y unos $38 millones para contratados. El nuevo instrumento eleva la planta de personal 100 agentes, hasta alcanzar 1.266 empleados. Ese aumento había despertado dudas al edil macrista Pedro Albornoz Piossek. El oficialismo insistió en que el incremento responde a que se regularizó la situación de alrededor de 80 empleados municipales.
A sus casas
Apenas inició la sesión, los concejales oficialistas solicitaron un cuarto intermedio de cuatro horas, hasta las 18, para que los docentes de la escuela municipal Petrona Campero de Adami puedan estar presentes al momento de sancionar el estatuto docente para los maestros municipales.
Lucas Cerúsico (UCR) y Albornoz Piossek votaron en contra del parate y arguyeron que se trataba de una maniobra para evitar la presencia de la prensa, versión desestimada por el resto de los ediles.
Turno tarde
Apenas comenzó la sesión, y con la presencia de una veintena de representantes de la escuela municipal, los concejales aprobaron el estatuto para los docentes municipales. De esta manera, los educadores de ese municipio dejarán de estar bajo el convenio de trabajo de empleados municipales.
Finalizados los aplausos, Albornoz Piossek arremetió de inmediato contra el intendente Campero, reclamando transparencia al proyecto de presupuesto. “Hay cosas que no me dejan tranquilo. En la partida Comunicaciones se asignan alrededor de $ 3 millones, que la maneja el secretario de Comunicación y Gobierno Abierto, Pablo Macchiarola. Me genera desconfianza dejarle administrar montos de todos los vecinos, cuando él reconoció públicamente que tiene una financiera a 20 metros de la municipalidad. No me puedo quedar tranquilo de entregar presupuesto a un usurero. También quiero que me respondan los pedidos de informes para tener la nómina de empleados que serán nombrados”, criticó el macrista.
La polémica con el funcionario de Campero había comenzado hace más de un mes, cuando el edil opositor cuestionó la cifra de nombramientos prevista en el proyecto de presupuesto. Macchiarola le había respondido denunciando que las esposas de Albornoz Piossek y de Cerúsico habían sido nombradas como asesoras de bloque.
Walter “Kabuby” Aráoz, presidente de la comisión de Hacienda, defendió el proyecto de presupuesto y las modificaciones realizadas en el Concejo. Celebró que el nuevo piso establecido para los empleados municipales sea el haber de categoría 18. Destacó también el aumento respecto al proyecto original a los fondos para obras públicas (se prevén $77 millones) y la inclusión de $60 millones de la Secretaría de Vivienda de la Nación remitidos para obras de mejoramiento urbano dentro del Programa de Mejoramiento Barrial (Promeba).
“Respecto a las críticas por los nombramientos, de los 100 cargos 83 son incorporaciones a planta permanente. Allí estamos regularizando las condiciones de muchos trabajadores”, defendió Aráoz. José Macome (Cambiemos Yerba Buena) pidió seriedad a sus pares y que se acuda a la Justicia en lugar de realizar acusaciones públicas en el recinto.
Finalmente el presupuesto fue sancionado por siete votos, con el voto negativo de Cerúsico y Albornoz Piossek. El nuevo instrumento, en tanto, prevé $98 millones para endeudamiento con la Provincia.