Primero fue Leonardo Heredia y ahora le sigue Augusto Lotti. El primero regresó de Buenos Aires hace unas semanas y cumplió parte de la cuarentena (obligatoria por venir de un lugar con circulación comunitaria de covid-19) en un hotel céntrico. El segundo casi que le tomó la posta, ya que también volvió de Buenos Aires hace apenas unos días y sigue los pasos de su compañero en el piso 6 del Catalina’s Park.
El miércoles por la noche, por ejemplo, el delantero contestaba preguntas a sus seguidores de Instagram (incluidos algunos de sus compañeros). Por el momento está bien y sin síntomas. Las interacciones con redes sociales son una de las tantas formas que encontró para pasar el rato en el encierro obligatorio al que está sometido. Primero una semana en el hotel, y luego otra en su casa. Antes de cambiar de lugar, le harán un hisopado para descartar covid-19 y ahí sí, podrá irse. “Tengo que estar una semana en el hotel y si me da negativo el test, me puedo ir a mi casa”, le comenta a LG Deportiva. En un principio, el test iba a ser realizado hoy por la noche y mañana estarían los resultados.
Mientras Heredia transita los últimos días antes de volver a salir y comenzar a regirse por el distanciamiento tucumano (y no el aislamiento rígido porteño), Lotti atraviesa los primeros. “Un día menos”, suele decir al final de cada jornada el delantero en sus redes sociales. Un día menos para volver a su departamento y para aprovechar las flexibilidades de Tucumán y entrenarse más cómodamente. “Vine para eso también, en Buenos Aires no está permitido salir a hacer ejercicio”, sostuvo.
De todas maneras, Lotti participa como puede, desde el hotel, de los entrenamientos junto al resto de sus compañeros. El cuerpo técnico realiza una serie de ensayos virtuales en estos días para no perder el ritmo durante las vacaciones. El regreso oficial será el 1 de julio, pero quizás siga siendo virtual pues Claudio Tapia fue claro: “los entrenamientos volverán cuando todo el país esté en fase 4”. Eso sin importar que varias provincias (como por ejemplo Tucumán) estén regresando de a poco a la normalidad y ya esté permitida la práctica colectiva de deportes, al aire libre. Tal como lo requeriría un entrenamiento básico de un equipo de fútbol como Atlético.
¿Seguirá Lotti siendo jugador “decano” para ese entonces? Algo similar le preguntó un seguidor de Instagram y él contestó con naturalidad y sinceridad: “por ahora, sí”. Nada más atinado, pues su contrato dura hasta el 30 de este mes pero sin dar pistas sobre si renovará el vínculo o buscará otros horizontes. El hecho de haber vuelto antes de lo estipulado para cumplir la cuarentena correctamente y sumarse al grupo rápidamente es una buena señal para hablar de la continuidad. Al menos se muestra predispuesto a retornar a la provincia cumpliendo todas las formalidades requeridas, que en estos momentos no son pocas.
Como Heredia en su momento y el resto de los repatriados, Lotti recibe cuatro comidas diarias de la cocina del hotel con ciertas restricciones. “Vienen a una hora determinada y me la dejan en la puerta de la habitación. Yo no puedo salir ni al pasillo”, aclara. El jugador recibe los mismos alimentos que sus “colegas” de cuarentena, eso sí.
El que sí estará seguro el 1 de julio es Ricardo Zielinski, quien ya renovó el contrato y se mantendrá al frente del equipo. Una novedad que Lotti se alegró de recibir. “Es una buena noticia para todos, es un técnico muy querido y respetado por el club. Completó muy buenas campañas y la idea es, una vez que se reanude todo, hacer una campaña mucho mejor que la anterior”, expresó.
Todos los jugadores que vengan de Buenos Aires pasarán por lo mismo: cuarentena. Lotti y Heredia ya pueden contarles de qué se trata.