Por Nicolás Iriarte
25 Junio 2020
VALIJA LLENA. Zielinski llegó a Atlético con ilusión y hasta ahora logró cosas importantes.
La sección “Todo es historia”, como su nombre lo indica, es utilizada en este suplemento para recordar equipos, partidos, personajes o hazañas del pasado. ¿Qué hacemos hablando del técnico actual de Atlético entonces? Sucede que, como pasa con sólo dos equipos en el fútbol profesional argentino, Ricardo Zielinski lleva tres años en su cargo (mañana será el aniversario de su debut, 1-1 ante Patronato). Él y Marcelo Gallardo, el otro entrenador que se mantiene al menos tres años como técnico del mismo equipo (está desde 2014), pueden darse el lujo de entrar en la sección para recordar sus propios logros. Mucho más si hablamos de un país en el que un entrenador dura tan pero tan poco. Además, Zielinski renovará el vínculo y estirará la estadía a por lo menos cuatro años y medio.
Es por eso, entonces, que no queda descolgado recordar los 10 momentos más importantes en la trayectoria de Zielinski en Atlético. Parece actual pero todo empezó en 2017, suficiente pasado para entrar en la historia de “Todo es historia”.
1- Su llegada al club. El miércoles 21 de junio de 2017, tras la abrupta salida de Pablo Lavallén, Ricardo Zielinski firmó el contrato con Atlético en el hotel Hilton. Se fotografió con Mario Leito y con su dirigente amigo, Miguel Abbondándolo.
2- El primero desde la platea. Al día siguiente, Zielinski fue un hincha más de Atlético cuando vio desde el palco el 1 a 1 ante Vélez. Junto a su cuerpo técnico ya delineaba planes.
3- Su primera práctica. El primer ensayo con Zielinski al mando fue el viernes 23 de junio. Se llevó a cabo en el estadio y fue pensando en el partido del lunes 26, ante Patronato (debut oficial).
4- Una final y un chaleco. La camiseta negra de River y su camisa del mismo color no podían convivir en la histórica final de la Copa Argentina 2017. El árbitro lo obligó a usar una pechera fluorescente durante todo el partido. Fue derrota, pero dejó un gran consuelo: la clasificación a la Libertadores 2018.
5- Otra vez, desde afuera. Ahora festejando. Atlético avanzó por primera vez a los octavos de final de la Copa Libertadores al empatar con Libertad en mayo de 2018. Zielinski festejó desde la pequeña platea del estadio “Nicolás Leoz”, porque había sido expulsado en el partido anterior. Se lo vio sufrir como cualquier hincha.
6- Una foto que se repitió. Días después del logro en Paraguay, Zielinski firmó la renovación del contrato. Algo que todos los hinchas y dirigentes se congraciaron en ver dos veces más: a fines de mayo en 2019 y ahora, hace muy pocos días, en 2020. Si bien todavía no firmó el contrato, ya fue informado oficialmente por el mismo club de que lo hará a su regreso a Tucumán.
7- El triunfo más festejado. Con un sobretodo negro y en pleno invierno, Zielinski dirigió quizás su triunfo más importante: 2-0 sobre Atlético Nacional en los octavos de la Libertadores. Le permitiría llegar a los cuartos, tras el partido de vuelta (0-1).
8- La eliminación a River. La Copa de la Superliga 2019 fue especial para Atlético y en especial para Zielinski. En los cuartos de final, enfrentó quizás al mejor colega que tiene en el continente. Gallardo no perdía una serie mano a mano desde hacía años y el “Ruso” y su equipo lo lograron. La llave incluyó el planteamiento de un partido perfecto en la ida y una derrota en la que Atlético aguantó lo más que pudo y se pudo ver todo el poderío de su rival.
9- La clasificación a su segunda Libertadores con Atlético. El quinto lugar en la Superliga 2018/19 le permitió a Zielinski clasificarse a su segunda Libertadores como técnico de Atlético (el club llegaba de esta manera a su tercera). Pese a la eliminación, por estar bien ubicado en las fases previas, pudo llegar a su segunda Sudamericana. Otro logro.
10- “¡Mirame a mí!”. El último partido de 2019 de Atlético fue un 2 a 2 ante Newell’s que tuvo de todo. Goles, goles errados y hasta piñas. Jonathan Cabral y Rodrigo Salinas protagonizaron una increíble pelea en el segundo tiempo por la que ambos se fueron expulsados. Yendo al túnel, los jugadores querían seguir peleando y ahí intervino el entrenador. Desesperado, como pocas veces se lo vio, trató de calmar a un incontenible Cabral que no podía sacarle la vista a Salinas. “¡Mirame a mí! ¡Mirame a mí!”, le repetía a su jugador para que entendiese lo que decía. “¡Te van a dar más fechas, ya está”!, le pedía Zielinski a Cabral, que tenía antecedentes. El jugador escuchó a su DT, se calmó y sólo recibió dos fechas.
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