Técnicos en caña: la bioenergía, eje temático

Concluyó la 22° reunión nacional de Satca con saldo positivo. Los especialistas presentaron 80 trabajos de investigación. El rol del etanol

INVESTIGACIÓN. Uno de los 80 trabajos en caña es explicado en el foro   INVESTIGACIÓN. Uno de los 80 trabajos en caña es explicado en el foro LA GACETA / FOTOS DE DANIEL SALVADOR

Con distintas exposiciones referidas a investigaciones sobre biomasa y energías renovables a partir de la caña de azúcar, se completó la segunda y última jornada de la 22ª reunión nacional de técnicos de la caña de azúcar que se desarrolló en la sede de la Sociedad Rural de Tucumán.

También el encuentro organizado por la Sociedad Argentina de Técnicos de Caña de Azúcar (Satca) cerró con la disertación de Agustín Torroba, experto en biocombustibles y energías renovables del Instituto Interamericano de Cooparticipación por la Agricultura (IICA-OEA) con sede en Costa Rica.

En la ocasión, Torroba -37 años, oriundo de La Pampa-, invitado especial en el marco de la celebración del 40 aniversario de la institución argentina, destacó el nivel de los trabajos de los jóvenes profesionales de Tucumán sobre la energía renovable a partir de la caña de azúcar y vaticinó un promisorio futuro para el bioetanol que se elabora en la provincia frente a la progresiva demanda mundial.

Como es costumbre al final de las reuniones anuales, la Satca elaboró un resumen final sobre los 80 trabajos presentados y se premiaron a los cuatro más destacados de las áreas agrícola e industrial. Al respecto, el presidente de la entidad, ingeniero Jorge Scandaliaris, señaló que la opinión general de los 500 participantes fue positiva, ya que esas investigaciones dejaron informaciones útiles para mejorar la actividad agroindustrial sucroalcoholera local y regional.

“Temas destacados fueron los biocombustibles y la cogeneración de energía con datos interesantes sobre la demanda mundial -agregó-, y se mostró que la Argentina es un país que puede ser abastecedor sosteniendo su mercado interno. Hay una nueva demanda que será grande y se dará en el corto tiempo, con las naftas de avión; serán con mezclas que obligarán a los países a ese cambio para reducir la contaminación mundial”.

También puntualizó que el crecimiento en la provisión de energía renovable, como el alcohol para alimentar a los autos con sistema flex, debe apuntalarse con un plan de desarrollo e inversiones consensuadas con las autoridades nacionales y provinciales. “Esto le vendría bien a la región, por la generación de puestos de trabajo y mejoras en la economía regional”.

Scandaliaris destacó que se evaluó la conferencia internacional sobre el cambio climático (COP27), en El Cairo, y las acciones directas para mejorar la evolución negativa de la atmósfera en próximos años. “En el mundo se usó en forma masiva el petróleo, lo que provocó un aumento global de 1,1 grado que se podría duplicar sino se revierte la gran demanda a nivel mundial”.

Al respecto, señaló que el mundo coincide en que se trata de un problema serio y que se resuelve “no con una seria intención sino de la de mano de los hechos concretos”. “La oportunidad de generar energía renovable está señalada y el desafío es aprovecharla; se necesita un plan para concretar el objetivo y para convencer sobre las inversiones”.

Buena formación

Por su lado, Torroba señaló a LA GACETA que el encuentro fue muy positivo, con trabajos “muy buenos de profesionales jóvenes muy bien formados, lo que indica que hay un buen futuro para la provincia”. “De acuerdo a lo que veo dentro de mi especialización, el punto de mayor potencialidad de la provincia es la producción del bioetanol para la mezcla con las naftas”

“En este sentido hay mucho por hacer, por eso mostré algunas experiencias internacionales, referencias que se podrían seguir, como armar mercados regionales de bioetanol hasta examinar otros mercados como Brasil, donde la mezcla con etanol es al 27% y tienen la tecnología flex, que es utilizar el alcohol en estado puro”.

Destacó también que hay conclusiones sobre cómo Tucumán y el NOA se pueden insertar en estas nuevas tendencias globales que llevan hacia las producciones de energías renovables.

Tucumán frente a una oportunidad global

Según Agustín Torroba, en materia de bioenergía hay muchas posibilidades de producción, y que en el caso de Tucumán el bioetanol es un “jugador relevante” dentro del mercado de la caña de azúcar. Explicó que “por el número final, hoy el 12% de las naftas del país se mezclan con etanol, 50% derivado de la caña y el otro 50% del maíz; a nivel global, el 16% de la caña se dedica al etanol”. “Por eso hay que articular una estrategia nacional y regional, de cómo potenciar el consumo de etanol. Otros países lo fomentan con tres fundamentos: el cuidado del medio ambiente, la situación económica relacionada con el desarrollo agrícola, social y demográfico, y la diversificación y seguridad energética, que resurgió a partir de la escasez por la guerra en Ucrania”. Consultado si se debe privilegiar la producción de azúcar o alcohol en época de daños climáticos al cañaveral, apuntó que siempre la prioridad es abastecer el mercado interno de azúcar y tratar de cumplir con la cuota de etanol. “Mirando a nivel NOA, a diferencia del plan alconafta, hay dos sectores: uno el de maíz y otro de caña de azúcar. Si llegara a faltar bioetanol previo a la zafra, podría interactuar con el sistema de producción de etanol de maíz, que está sedentario”, apuntó.

Finalmente, dijo que la demanda global de bioetanol se disparará a partir de la mezcla en nafta de avión, y que en ese sentido Tucumán tiene una gran oportunidad de transformarse en proveedor, con un plan serio y un decidido apoyo nacional.

Comentarios