Por Marcelo Aguaysol
19 Diciembre 2024
La caída del poder adquisitivo en medio de una brusca actualización de precios de la economía golpeó al mercado laboral. En el caso particular del aglomerado urbano del Gran Tucumán-Tafí Viejo, el empobrecimiento de la clase media se evidenció con fuerza en la cantidad de ocupados que salieron a buscar otro ingreso para llegar a fines de mes sin grandes deudas ni privaciones. Un 25,5% de los ocupados del área metropolitana, que totalizan 413.000 personas, son demandantes de empleo. El dato del tercer trimestre del año, el de mayor actividad económica en Tucumán, muestra que hubo 13.000 trabajadores más que en igual período de 2023, que están en búsqueda constante de otro salario.
El mercado laboral provincial, además, muestra otro dato inquietante: la baja de ocupados que, en el último año pasó de los 422.000 trabajadores registrados el año pasado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) a los 413.000 empleados. El diagnóstico del organismo estadístico nacional consignó que el desempleo en el Gran Tucumán afectó al 5,5% de la Población Económicamente Activa (suman 24.000 las personas que no pueden insertarse en el mercado laboral), 2.000 menos que en el tercer trimestre de 2023, cuando la tasa fue del 5,8%, según el reporte oficial. El “efecto desaliento” golpeó las expectativas de aquellos tucumanos que, ante la recesión y la cautela de los empleadores, no salieron a buscar trabajo. En todo caso, forman parte de la informalidad que, en el caso tucumano, afecta a no menos del 45% de los asalariados.
A nivel nacional, el desempleo se ubicó en 6,9% de la población económicamente activa en el tercer trimestre del año, con un descenso respecto del trimestre anterior, aunque por encima del mismo período de 2023.
De acuerdo con información del Indec, en el tercer trimestre de este año, la tasa de desocupación -personas que no tienen ocupación, están disponibles para trabajar y buscan empleo activamente, como proporción de la población económicamente activa (PEA)- se ubicó en 6,9%.
En el segundo trimestre, la desocupación había llegado a 7,6%; mientras que en el tercer trimestre de 2023 la tasa fue de 5,7%. En el tercer trimestre, la tasa de actividad -que mide la población económicamente activa (PEA) sobre el total de la población- alcanzó el 48,3%; y la tasa de empleo -que mide la proporción de personas ocupadas con relación a la población total se ubicó en 45%.
En el período julio a septiembre, se verifica una reducción en la población ocupada “con descuento jubilatorio” (caída interanual del 3,8%), siendo la principal causa en la reducción del empleo, atento a que la población ocupada “sin descuento jubilatorio” registró un leve incremento (0,04 % interanual), indica un análisis de las cifras realizado por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA).
La tasa de ocupados demandantes registró un incremento significativo (2,4 puntos porcentuales), así como también lo hizo la tasa de subocupación (1,1 punto), ambas en relación al mismo trimestre de 2023.
Estas variaciones, sumadas al incremento en la tasa de desocupación, resultaron en un crecimiento en la presión sobre el mercado de trabajo, la cual escaló 15,4 puntos, acota el CEPA.
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