13 Enero 2015
EN PUERTO ARGENTINO. Se instaló el busto de la “Dama de Hierro”. tWITTER @TelegraphNews
BUENOS AIRES.- El titular de la Comisión Nacional de Ex Combatientes de Malvinas, Ernesto Alonso, consideró una “provocación” y también un signo de “debilidad” el emplazamiento de un busto de bronce con la imagen de la ex primer ministro británica Margaret Thatcher en Puerto Argentino.
“Es una provocación, no sólo a la Argentina, sino a la región, y a la paz. Colocar un busto de un personaje nefasto, incluso para su pueblo, como lo es Margaret Thatcher, es una provocación, porque representa lo peor de la política que es el neocolonialismo, el hostigamiento a través de la ocupación militar y el neoliberalismo”, dijo a Télam Alonso.
No obstante, interpretó esta acción como una muestra de “debilidad” de parte del gobierno del Reino Unido, ya que sólo pueden lograr su cometido a través de la “imposición”, y además consideró que la decisión del primer ministro británico David Cameron de homenajear nuevamente en Malvinas a Thatcher “refleja la continuidad del colonialismo” y de la decisión del gobierno del Reino Unido de “no respetar las resoluciones de las Naciones Unidas (ONU)”.
En cuanto a la población de Malvinas, cuya voz nunca se alzó contra estas acciones, el ex combatiente explicó que los pobladores de las islas “son implantados”, con un “total control de la política migratoria”, y recordó que el último censo mostró “que una pequeña minoría son nacidos en Malvinas, mientras que el resto son parte de una inmigración planificada, para cumplir una función específica que tiene que ver con la explotación de recursos naturales y de hidrocarburos”.
Alonso señaló también que Malvinas “es una causa regional”, tal como lo han expresado todos los países de la región a través de sus apoyos, que -consideró- “no soportan más la actitud de Gran Bretaña y el resto de los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas”.
Dijo también que “para los británicos las Islas Malvinas representan la puerta de entrada a la Antártida“, mientras que para la Argentina y la región, significan “el futuro”.
El busto, que se emplazó sobre un alto pedestal de piedra en Puerto Argentino, la capital isleña, pesa 27 kilos y está hecho con base de arcilla y cubierto con bronce, obra del escultor Steve Massam en base a una foto de tomada a la llamada “Dama de Hierro” durante su visita a las Malvinas en 1983, por primera vez después de la guerra.
El monumento, que fue emplazado en la calle Thatcher Drive, frente al edificio del Secretariado kelper, replica también una frase de Thatcher, pronunciada el 3 de abril de 1982, un día después del desembarco argentino en las islas: “ellos son pocos en número, pero tienen el derecho a vivir en paz, a elegir su propia forma de vida y determinar su propia lealtad”.
Con esa frase, la “Dama de Hierro” interpretó el “derecho a la autodeterminación de los pueblos” que el Reino Unido alegó para defender sus intereses en las islas, pero negó en otros conflictos territoriales. (Télam)
“Es una provocación, no sólo a la Argentina, sino a la región, y a la paz. Colocar un busto de un personaje nefasto, incluso para su pueblo, como lo es Margaret Thatcher, es una provocación, porque representa lo peor de la política que es el neocolonialismo, el hostigamiento a través de la ocupación militar y el neoliberalismo”, dijo a Télam Alonso.
No obstante, interpretó esta acción como una muestra de “debilidad” de parte del gobierno del Reino Unido, ya que sólo pueden lograr su cometido a través de la “imposición”, y además consideró que la decisión del primer ministro británico David Cameron de homenajear nuevamente en Malvinas a Thatcher “refleja la continuidad del colonialismo” y de la decisión del gobierno del Reino Unido de “no respetar las resoluciones de las Naciones Unidas (ONU)”.
En cuanto a la población de Malvinas, cuya voz nunca se alzó contra estas acciones, el ex combatiente explicó que los pobladores de las islas “son implantados”, con un “total control de la política migratoria”, y recordó que el último censo mostró “que una pequeña minoría son nacidos en Malvinas, mientras que el resto son parte de una inmigración planificada, para cumplir una función específica que tiene que ver con la explotación de recursos naturales y de hidrocarburos”.
Alonso señaló también que Malvinas “es una causa regional”, tal como lo han expresado todos los países de la región a través de sus apoyos, que -consideró- “no soportan más la actitud de Gran Bretaña y el resto de los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas”.
Dijo también que “para los británicos las Islas Malvinas representan la puerta de entrada a la Antártida“, mientras que para la Argentina y la región, significan “el futuro”.
El busto, que se emplazó sobre un alto pedestal de piedra en Puerto Argentino, la capital isleña, pesa 27 kilos y está hecho con base de arcilla y cubierto con bronce, obra del escultor Steve Massam en base a una foto de tomada a la llamada “Dama de Hierro” durante su visita a las Malvinas en 1983, por primera vez después de la guerra.
El monumento, que fue emplazado en la calle Thatcher Drive, frente al edificio del Secretariado kelper, replica también una frase de Thatcher, pronunciada el 3 de abril de 1982, un día después del desembarco argentino en las islas: “ellos son pocos en número, pero tienen el derecho a vivir en paz, a elegir su propia forma de vida y determinar su propia lealtad”.
Con esa frase, la “Dama de Hierro” interpretó el “derecho a la autodeterminación de los pueblos” que el Reino Unido alegó para defender sus intereses en las islas, pero negó en otros conflictos territoriales. (Télam)