16 Enero 2015
CANICOBA CORRAL. Sorprendido por las actitudes del fiscal. dyn (archvo)
BUENOS AIRES.- El juez Rodolfo Canicoba Corral, a cargo de la causa sobre el atentado contra la AMIA, puso en duda la “fehaciencia” (sic) de la denuncia del fiscal Alberto Nisman por “encubrimiento” contra la presidenta, Cristina Fernández. Argumentó que el fiscal, quien remitió el caso al Juzgado de Ariel Lijo, incurrió en “irregularidades” como no haberlo “mandado a sorteo o haberme consultado a mí que soy el juez de la causa”, y añadió: “ninguna de estas cosas sucedió; lo que me hace dudar de la fehaciencia de esta investigación o de esta denuncia”.
Además, dijo no saber si las escuchas telefónicas utilizadas en la denuncia por Nisman “son de las que han sido ordenadas judicialmente o no”. “La dirección de la investigación la tenía el fiscal; coadyuvaba en la investigación, entre otros, la Secretaría de Inteligencia. Acá, por lo que yo he visto, hay como una desviación. Me parece que los conducidos resultan ser los conductores y el que debía haber conducido resulta ser conducido él”, manifestó Canicoba Corral.
El magistrado, quien protestó por haberse tenido que “enterar” de la denuncia por los medios de comunicación, adujo que “las escuchas (telefónicas) y este tipo de datos de inteligencia sirven como camino para llegar a algo, pero nunca puede ser una prueba acabada toda vez que se realizan sin ningún control: no hay fehaciencia”.
Canicoba Corral, al retomar la crítica a Nisman por haber remitido la denuncia a Lijo, manifestó que le “llama poderosamente la atención” que el fiscal se haya “arrogado la facultad de iniciar una investigación paralela”, al haberle dado “intervención a un juez que está investigando otro hecho que no tiene nada que ver con éste (por el eventual encubrimiento) ni con el del principal atentado”. “Tengo para mí claro que lo que debió haber hecho el fiscal si quería proceder con claridad era haber remitido a la Cámara para que la Cámara sorteara el Juzgado que le correspondiera o haberme consultado a mí, que soy el juez natural de la causa”. (DyN)
Además, dijo no saber si las escuchas telefónicas utilizadas en la denuncia por Nisman “son de las que han sido ordenadas judicialmente o no”. “La dirección de la investigación la tenía el fiscal; coadyuvaba en la investigación, entre otros, la Secretaría de Inteligencia. Acá, por lo que yo he visto, hay como una desviación. Me parece que los conducidos resultan ser los conductores y el que debía haber conducido resulta ser conducido él”, manifestó Canicoba Corral.
El magistrado, quien protestó por haberse tenido que “enterar” de la denuncia por los medios de comunicación, adujo que “las escuchas (telefónicas) y este tipo de datos de inteligencia sirven como camino para llegar a algo, pero nunca puede ser una prueba acabada toda vez que se realizan sin ningún control: no hay fehaciencia”.
Canicoba Corral, al retomar la crítica a Nisman por haber remitido la denuncia a Lijo, manifestó que le “llama poderosamente la atención” que el fiscal se haya “arrogado la facultad de iniciar una investigación paralela”, al haberle dado “intervención a un juez que está investigando otro hecho que no tiene nada que ver con éste (por el eventual encubrimiento) ni con el del principal atentado”. “Tengo para mí claro que lo que debió haber hecho el fiscal si quería proceder con claridad era haber remitido a la Cámara para que la Cámara sorteara el Juzgado que le correspondiera o haberme consultado a mí, que soy el juez natural de la causa”. (DyN)