03 Enero 2017
RECORRIDOS. El vicegobernador Jaldo inaugura las obras ante vecinos del sur, junto a funcionarios oficialistas. PRENSA LEGISLATURA
El 2017 de elecciones a diputado nacional estará cargado de tensión entre el PJ-FpV y los opositores del ApB-Cambiemos. Y el primer motivo de debate en este comienzo de año gira en torno a las obras públicas para la prevención de inundaciones.
Ayer, el vicegobernador Osvaldo Jaldo, a cargo del PE por el viaje del gobernador, Juan Luis Manzur, salió al cruce de radical José Cano (director del Plan Belgrano) y del peronista disidente Domingo Amaya (secretario de Vivienda de la Nación), quienes habían acusado a la Casa de Gobierno de “invertir poco del poco del presupuesto provincial” para evitar desbordes de ríos, caídas de puentes y otros desastres que pueden producir las lluvias estivales. “Estamos en permanente reunión con el Comité de Emergencia para prevenir cualquier inundación, teniendo en cuenta que estamos en fechas donde las condiciones climáticas a veces nos golpean. Trabajamos para que la sorpresa y los problemas se prevengan. Por ello se realizaron canalizaciones, limpieza de desagües y obras de infraestructura con recursos provinciales; levantamos puentes caídos y defensas en los ríos para evitar cualquier desastre natural”, enumeró Jaldo, en una rueda de prensa, durante unos recorridos en las comunas de Villa Quinteros y Río Seco, al sur tucumano.
El vicegobernador admitió que si las lluvias son demasiado copiosas y en poco tiempo, la cuestión puede complicarse. “Sabemos que dependemos (de la naturaleza), pero nos encontramos listos para atender las dificultades en relación a este tema, si se producen en algún lugar de nuestro territorio”, añadió.
Días atrás, Cano, Amaya e intendentes del ApB-Cambiemos habían advertido sobre la falta de obras en zonas de riesgo. “Vemos con preocupación que la gestión de Manzur no acompañe el ritmo de inversiones y políticas públicas que tiene la administración del presidente, Mauricio Macri, para con la provincia”, fue la crítica de Cano.
Jaldo, sin mencionar a sus rivales políticos, enunció los avances en esa materia que se lograron con fondos locales. Incluso, elogió la gestión de delegados rurales y de intendentes que afrontaron algunas tareas con recursos propios. “Todo este año trabajamos para prevenir y evitar”, enfatizó el vicegobernador.
Un “extra” para la DPA
Con la llegada del verano, el Poder Ejecutivo adoptó una medida para fortalecer las filas de la Dirección Provincial del Agua (DPA), una de las reparticiones dependientes de la Secretaría de Obras Públicas que se encargan de las tareas de prevención de inundaciones en ríos y arroyos.
El 19 de diciembre, el gobernador firmó el decreto 4.107, que fue publicado la semana pasada en el Boletín Oficial.
A través de ese instrumento, Manzur señaló que los empleados de la DPA cumplen “un régimen horario mayor al resto de la Administración Pública Provincial, en razón de la necesidad de agilizar la ejecución de obras”.
El decreto añade que “estas circunstancias” van en contra de los objetivos de la Dirección Provincial del Agua y, por ese motivo, era importante brindar “la apoyatura necesaria para subsanar los inconvenientes generados”. Así, Manzur decretó que se les otorgue un extra de hasta $ 5.500 mensuales por agente de esa repartición, “en concepto de guardia y atención de emergencias de obras. Entre otras condiciones, se especifica que la bonificación corresponde “sólo en los casos en que (los empleados) cumplan por lo menos tres horas fuera del horario habitual”.
También se contempló un aporte extraordinario de hasta $ 6.150 mensuales por agente “en concepto de función especializada”. El decreto 4.107 no expresa detalles sobre qué tareas implicaría esa categoría ni la cantidad de cargos que abarca.
Ambos adicionales son incompatibles con el régimen de descansos compensatorios y con otras compensaciones previstas para trabajadores de la Administración Pública.
Ayer, el vicegobernador Osvaldo Jaldo, a cargo del PE por el viaje del gobernador, Juan Luis Manzur, salió al cruce de radical José Cano (director del Plan Belgrano) y del peronista disidente Domingo Amaya (secretario de Vivienda de la Nación), quienes habían acusado a la Casa de Gobierno de “invertir poco del poco del presupuesto provincial” para evitar desbordes de ríos, caídas de puentes y otros desastres que pueden producir las lluvias estivales. “Estamos en permanente reunión con el Comité de Emergencia para prevenir cualquier inundación, teniendo en cuenta que estamos en fechas donde las condiciones climáticas a veces nos golpean. Trabajamos para que la sorpresa y los problemas se prevengan. Por ello se realizaron canalizaciones, limpieza de desagües y obras de infraestructura con recursos provinciales; levantamos puentes caídos y defensas en los ríos para evitar cualquier desastre natural”, enumeró Jaldo, en una rueda de prensa, durante unos recorridos en las comunas de Villa Quinteros y Río Seco, al sur tucumano.
El vicegobernador admitió que si las lluvias son demasiado copiosas y en poco tiempo, la cuestión puede complicarse. “Sabemos que dependemos (de la naturaleza), pero nos encontramos listos para atender las dificultades en relación a este tema, si se producen en algún lugar de nuestro territorio”, añadió.
Días atrás, Cano, Amaya e intendentes del ApB-Cambiemos habían advertido sobre la falta de obras en zonas de riesgo. “Vemos con preocupación que la gestión de Manzur no acompañe el ritmo de inversiones y políticas públicas que tiene la administración del presidente, Mauricio Macri, para con la provincia”, fue la crítica de Cano.
Jaldo, sin mencionar a sus rivales políticos, enunció los avances en esa materia que se lograron con fondos locales. Incluso, elogió la gestión de delegados rurales y de intendentes que afrontaron algunas tareas con recursos propios. “Todo este año trabajamos para prevenir y evitar”, enfatizó el vicegobernador.
Un “extra” para la DPA
Con la llegada del verano, el Poder Ejecutivo adoptó una medida para fortalecer las filas de la Dirección Provincial del Agua (DPA), una de las reparticiones dependientes de la Secretaría de Obras Públicas que se encargan de las tareas de prevención de inundaciones en ríos y arroyos.
El 19 de diciembre, el gobernador firmó el decreto 4.107, que fue publicado la semana pasada en el Boletín Oficial.
A través de ese instrumento, Manzur señaló que los empleados de la DPA cumplen “un régimen horario mayor al resto de la Administración Pública Provincial, en razón de la necesidad de agilizar la ejecución de obras”.
El decreto añade que “estas circunstancias” van en contra de los objetivos de la Dirección Provincial del Agua y, por ese motivo, era importante brindar “la apoyatura necesaria para subsanar los inconvenientes generados”. Así, Manzur decretó que se les otorgue un extra de hasta $ 5.500 mensuales por agente de esa repartición, “en concepto de guardia y atención de emergencias de obras. Entre otras condiciones, se especifica que la bonificación corresponde “sólo en los casos en que (los empleados) cumplan por lo menos tres horas fuera del horario habitual”.
También se contempló un aporte extraordinario de hasta $ 6.150 mensuales por agente “en concepto de función especializada”. El decreto 4.107 no expresa detalles sobre qué tareas implicaría esa categoría ni la cantidad de cargos que abarca.
Ambos adicionales son incompatibles con el régimen de descansos compensatorios y con otras compensaciones previstas para trabajadores de la Administración Pública.
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