El DT de San Martín, Pablo de Muner, volvió a hablar con la prensa, después de largos meses de silencio.
"Después de la derrota, después de la forma en que perdimos, era importante que saliera a aclarar algunas cosas", dijo.
El entrenador contó que le "hicieron cosas increíbles". Y mencionó: "Me tiraron un perro muerto en la puerta de mi casa".
"Ese es el odio que a veces se genera a través de las redes sociales. Siempre me manejé con la verdad, no le tengo miedo a nadie, y me hicieron cosas terribles", dijo.
En la conferencia habló de problemas con la dirigencia del club. Comenzó, este problema, porque él había pedido un 9 de jerarquía y el club no se lo consiguió.
En cuanto a las redes, dijo que hubo un grupo de personas que intentó instalar que antes del partido ante Belgrano que él había arreglado para irse a Defensa y Justicia, lo cual era una mentira. "Estallé de bronca, yo dejé pasar varias oportunidades para irme", dijo. "Iba a ganar más dinero y no lo hice, me quedé porque me había comprometido con los jugadores y la gente".
"Con las mentiras se fue naturalizando el odio. Persiguieron jugadores como es el caso Escalante. No está bueno", dijo. Añadió que fue muy notorio el ataque a los jugadores, por parte de algunos sectores. "Hace tres meses hablaron con un entrenador, que quizás el día que me vaya sea el entrenador", dijo.