14 Julio 2015
EN AGUILARES. La obra del nuevo puente, a metros del actual viaducto. LA GACETA / FOTO DE OSVALDO RIPOLL
El puente sobre el río Medinas, en la vieja traza de la ruta 38, está señalado como el más peligroso de la región. En el 2012, los accidentes de tránsito arrojaron el saldo de ocho muertos y cerca de 30 heridos en ese lugar. La inauguración de la nueva traza de esa ruta, a fines del 2013, trajo alivió al infernal tránsito entre Concepción y Aguilares. Sin embargo el puente siguió siendo peligroso: es angosto y, en épocas de zafra, colapsa a causa de las rastras cañeras. Un movimiento vecinal, encabezado por el dirigente Gino Lezcano, lanzó hace un par de años una campaña para pedir la construcción de un paso nuevo sobre el Medinas. Ese anhelo está cerca de concretarse.
En el 2013, y luego de algunos contratiempos, Vialidad de la Nación lanzó la licitación y adjudicó la obra, que se inició el año pasado. Ahora, la construcción del nueve puente, a cargo de la constructora Romero Cammisa, se encuentra en una etapa avanzada y podría quedar habilitado en el primer mes del 2016. Se levanta muy cerca del actual, que será destruido cuando concluya la nueva obra. “En principio se lo iba a hacer sobre la estructura vieja, pero al estar inestable, Vialidad optó por una construcción nueva”, comentó el ingeniero Fernando Conterno, a cargo de los trabajos en el lugar.
En este momento, las labores están concentradas en la viga de cabecera del estribo norte, muy cerca de la ruta. Por esa razón, y con el fin de no poner en riesgo a los transeúntes y a los operarios, se decidió habilitar solo una media calzada del viejo puente. El paso es controlado durante las 24 horas por personal de Tránsito de la Municipalidad de Aguilares. Conterno recomendó que los que puedan tomar por la nueva ruta 38 para ir a Concepción, lo hagan sin dudar. De esta manera se reducirá el tránsito sobre el viejo puente.
La obra
El viaducto que se construye dispondrá de cinco tramos de 29 metros cada uno, con cuatro columnas por pila de unos ocho metros de altura. El ancho de la calzada será de 7,30 metros con veredas peatonales en ambos lados, barandas metálicas y defensas vehiculares de hormigón. “Antes no se solía contemplar las veredas; ahora sí. Además, la iluminación contribuirá a mejorar la seguridad vial”, apuntó el ingeniero.
Por su parte, Lezcano dijo que está muy contento con la construcción del puente. “En el actual murieron muchas personas, e incluso niños. Inclusive hoy siguen produciéndose accidentes”, lamentó. Claudio Verón y Yisel Vega, a cargo de la seguridad del tránsito en la zona del puente, coincidieron en afirmar que la obra “es una de las más anheladas en Aguilares”. “Aquí, mucha gente apreciada de nuestra ciudad perdió la vida y otros quedaron con graves secuelas. De ahí que esperamos que esta obra ayude a ponerle fin a tantas desgracias”, se ilusionaron.
En el 2013, y luego de algunos contratiempos, Vialidad de la Nación lanzó la licitación y adjudicó la obra, que se inició el año pasado. Ahora, la construcción del nueve puente, a cargo de la constructora Romero Cammisa, se encuentra en una etapa avanzada y podría quedar habilitado en el primer mes del 2016. Se levanta muy cerca del actual, que será destruido cuando concluya la nueva obra. “En principio se lo iba a hacer sobre la estructura vieja, pero al estar inestable, Vialidad optó por una construcción nueva”, comentó el ingeniero Fernando Conterno, a cargo de los trabajos en el lugar.
En este momento, las labores están concentradas en la viga de cabecera del estribo norte, muy cerca de la ruta. Por esa razón, y con el fin de no poner en riesgo a los transeúntes y a los operarios, se decidió habilitar solo una media calzada del viejo puente. El paso es controlado durante las 24 horas por personal de Tránsito de la Municipalidad de Aguilares. Conterno recomendó que los que puedan tomar por la nueva ruta 38 para ir a Concepción, lo hagan sin dudar. De esta manera se reducirá el tránsito sobre el viejo puente.
La obra
El viaducto que se construye dispondrá de cinco tramos de 29 metros cada uno, con cuatro columnas por pila de unos ocho metros de altura. El ancho de la calzada será de 7,30 metros con veredas peatonales en ambos lados, barandas metálicas y defensas vehiculares de hormigón. “Antes no se solía contemplar las veredas; ahora sí. Además, la iluminación contribuirá a mejorar la seguridad vial”, apuntó el ingeniero.
Por su parte, Lezcano dijo que está muy contento con la construcción del puente. “En el actual murieron muchas personas, e incluso niños. Inclusive hoy siguen produciéndose accidentes”, lamentó. Claudio Verón y Yisel Vega, a cargo de la seguridad del tránsito en la zona del puente, coincidieron en afirmar que la obra “es una de las más anheladas en Aguilares”. “Aquí, mucha gente apreciada de nuestra ciudad perdió la vida y otros quedaron con graves secuelas. De ahí que esperamos que esta obra ayude a ponerle fin a tantas desgracias”, se ilusionaron.