Hay dudas frente a la situación epidemiológica de Tucumán; los casos de neumonía bilateral mantienen en vilo a la población ante la falta de precisiones. Julio Dantur, director Médico del Centro Privado de Cardiología (CPC), asegura que se trata de una nueva variante de covid-19. “Mi impresión científica es que es la BQ 1.1, está descrita en muchas publicaciones. Incluso en diciembre, la ministra de Salud de la Nación (Carla Vizzotti) habló de los falsos negativos y de la falta de test para detectar el Ómicron”, fundamentó.
El médico resaltó que en la institución “nunca hubo legionella” y que “todos los casos de bronconeumonía han sido de causa conocida”. “Algunos con bacterias diagnosticadas, otros con covid positivo y un grupo con test negativo que, tanto radiológica como clínicamente, los foros de neumología e infectología dieron diagnóstico de covid no diagnosticado”, explicó a LA GACETA.
En particular, Dantur hizo mención a los dos fallecimientos y aseguró que las bacterias que los provocaron fueron detectadas. “A todos nos preocupa que haya infecciones y no tengamos información concreta. Lo que se conoce se tiene que saber, y lo que no se conoce se tiene que decir que no se sabe”, remarcó.
Es por eso que puso énfasis en la importancia de que el personal de salud y la población en general tengan colocadas las dosis correspondientes contra el coronavirus. “Estamos en una situación en la que hay que ocuparse. El Ministerio (de Salud) tiene que salir a pedir que tengan la dosificación completa. Así tendríamos la posibilidad de tener mucho más protegido al personal”, dijo.
“La comunidad no corre tanto riesgo porque no está encerrada dentro de una unidad de terapia intensiva y que convive tan de cerca con los virus como el personal de salud”, agregó el profesional.
Asimismo, Dantur indicó que luego de los contagios que se detectaron a mediados de enero e inicios de febrero, “no hubo más casos en la institución”.
Por este motivo, el CPC continúa trabajando con normalidad, aunque con medidas restrictivas. “Tenemos un control periódico en el agua, sólo por las dudas, aunque en lo que más estamos enfatizando es en el coronavirus”, dijo.
“Al paciente que ingresa a internación lo testeamos tres veces -nasofaríngeo, nasal y por saliva- y al paciente que va a estar inmunocomprometido, hacemos filmarray (un equipo que detecta 17 virus respiratorios y tres bacterias)”, detalló el médico. Además, mencionó otras medidas de bioseguridad como “sanitización, ingreso con barbijo, número limitado de visitas por paciente y controles”. “Queremos dar seguridad a los pacientes y a los empleados, estoy convencido como médico que esto está pasando y tiene que acabarse” cerró. (Producción periodística: Bárbara Nieva)