Por Álvaro Medina
19 Enero 2025
TALENTOS. Viviana destaca el nivel de su equipo de trabajo.
Varios años atrás, en un aula de la escuela Normal Juan Bautista Alberdi, una profesora infundía en sus alumnos un profundo interés y curiosidad por la Química. Los adolescentes cursaban el último año y, cuando terminaron la secundaria, muchos de ellos se inscribieron en carreras relacionadas con esa ciencia.
Entre esos estudiantes se encontraba Viviana Rapisarda, actualmente doctora en Ciencias Químicas, docente de la UNT, investigadora del Conicet y directora del prestigioso Instituto superior de Investigaciones Biológicas (Insibio), de doble dependencia UNT-Conicet.
“Teníamos una profesora que nos inculcó un amor inmenso por la ciencia”, recuerda sonriendo. “Nos mostró cómo la química estaba en todo: en lo animado, en lo inanimado, en cada rincón del mundo”. Aquella adolescente se inscribió en la Licenciatura en Química de la Facultad de Bioquímica, Química y Farmacia y allí se recibió y se doctoró. Luego se perfeccionó en carreras de posgrado en Italia.
La salud
Actualmente, dirige un equipo que desarrolla metodologías innovadoras para el cuidado de limones post cosecha, es decir desde que son cortados del árbol y hasta que llegan a góndolas. El proyecto busca reducir el uso de fungicidas tóxicos logrando soluciones de impacto para una de las actividades económicas clave en la provincia.
Años de investigación y trabajo hicieron que aquel impulso inicial que transformó la vida de Viviana desemboque hoy en este desarrollo, con potencial para impactar en la economía, la salud y el medio ambiente de su comunidad.
“Las plantas, al igual que los seres humanos, también se enferman”, explica la científica conectando las dos dimensiones de la investigación que lleva a cabo con un numeroso equipo de especialistas: la salud vegetal y la humana. “Nosotros estamos centrados en el cuidado de la calidad de los frutos de limón luego de la cosecha. El fruto es capaz de ser infectado por hongos, bacterias y virus y esas infecciones deben ser controladas de manera tal de que la producción no pierda rentabilidad.
A ESCALA. Los científicos pudieron realizar ensayos de carácter “semi comercial” y probar la viabilidad y sostenibilidad de las metodologías investigadas. Gentileza fotos de Viviana Rapisarda
Para esto, el productor proteger ese limón para que no llegue contaminado a la góndola y tenga una ‘vida de estante’ prolongada. Nuestro objetivo es estudiar cómo reducir el uso de los fungicidas, potencialmente tóxicos para la población y el ambiente, que se utilizan en esta etapa, incorporando técnicas más amigables y efectivas que, además de cuidar la fruta, no pongan en riesgo la salud de los consumidores ni de trabajadores en la línea de empaque”.
Innovación
Para esto, el equipo de científicos liderados por Viviana indagó en metodologías químicas, como el tratamiento con moléculas oxidantes; físicas, utilizando, por ejemplo, radiación ultravioleta de baja intensidad; y biológicas, mediante el uso de microorganismos benéficos. Estos estudios abordan tanto la prevención como la cura.
“Nuestros ensayos son de tipo experimental pero siempre orientados hacia la aplicación”, aclara la Viviana y luego revela cómo este sentido pragmático del proyecto los llevó a vincularse con distintas instituciones de ciencia de la provincia como el INTA y la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres.
Además, trabajan en conjunto con profesionales de otras áreas relacionadas a la investigación y desarrollo en la agroindustria. Tuvieron, incluso, la oportunidad de hacer ensayos en la línea de empaque a escala “semicomercial” con excelentes resultados, lo que permitió dimensionar la viabilidad y sostenibilidad de las investigaciones.
En el mundo
La científica detalla que estas metodologías, además de responder al cuidado de los limones tucumanos mediante técnicas amigables con el ambiente y la salud, suman posibles soluciones para proteger al fruto en tiempos prolongados cuando deben ser exportados.
Por otra parte, representan un alivio para los productores, quienes enfrentan retos y restricciones crecientes en el marco de demandas internacionales de mercados cada vez más exigentes.
En ese sentido, el enfoque del proyecto está alineado con la tendencia global en las legislaciones sobre el tema, que priorizan cada vez más la salud y el medio ambiente sobre los beneficios a corto plazo.
“No somos los únicos en el mundo realizando este tipo de desarrollos”, afirma Rapisarda. “Hay grupos de trabajo similares en los distintos puntos donde la actividad citrícola es importante: en España, en Estados Unidos y Sudáfrica se llevan a cabo investigaciones. Esto demuestra la importancia de explorar estrategias e innovaciones inspiradas en las problemáticas locales específicas”.
Otro impacto de envergadura del proyecto, es la formación de profesionales de nivel internacional. “Las personas que formamos adquieren capacidades y conocimientos que les permiten trabajar en laboratorios de punta en cualquier lugar del mundo”, asegura Viviana. Según la científica, esto produce una sinergia que potencia la importación de conocimiento, a través de las experiencias internacionales, y a su vez permite generar vínculos entre la ciencia tucumana y las principales instituciones científicas del mundo.
Ficha técnica
El nombre del proyecto es tratamientos alternativos para el control de fitopatógenos causantes de enfermedades poscosecha en limones
Descripción del proyecto: Este proyecto se centra en el desarrollo de nuevas estrategias para el control no contaminante de enfermedades poscosecha en limones, que llevan al deterioro de los frutos y a pérdidas en la productividad. Los tratamientos que desarrollamos involucran sustancias de baja o nula toxicidad, métodos físicos tales como luz o calor y tratamientos biológicos mediante el uso de sustancias producidas por bacterias benéficas. Además, analizamos el estado fisiológico y morfológico de los hongos después de la aplicación de los distintos tratamientos, a fin de dilucidar los mecanismos de acción que llevan a la inhibición de estos microorganismos. El cultivo de estos frutos es de gran relevancia socio-económica en el Noroeste Argentino, principalmente para Tucumán. Sin embargo, el uso creciente de fungicidas, que son sustancias químicas sintéticas potencialmente tóxicas para la población y el ambiente, representa una problemática importante. El proyecto involucra múltiples actores, con distintos saberes y de diferentes disciplinas.
Institución: INSIBI, Unidad de doble dependencia del CONICET y la UNT.
Investigadora referente: Doctora Viviana A. Rapisarda viviana.
Contacto: viviana.rapisarda@fbqf.unt.edu.ar
Estado del proyecto: Activo
Crónicas sobre desarrollos científicos en Tucumán
Esta es la tercera entrega de una serie inspirada en la potencia de los desarrollos científicos que se realizan en la provincia y que convierten a Tucumán en un polo de ciencia a nivel nacional e internacional. Abordamos investigaciones que aprovechan nuestra riqueza natural en búsqueda de soluciones para problemas ambientales, fortalecimiento y renovación de la agro industria y soluciones para problemas habitacionales. Un espacio para acercar la ciencia a todos los ciudadanos y poder poner en contacto a los sectores públicos y privados con la existencia de innovaciones que pueden ser desarrolladas a escala para generar impacto en nuestra sociedad.
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